Los despojos mortales del pequeño Maximiliano Tabares Caro fueron hallados en el municipio de Segovia. La noticia fue confirmada por Aníbal Gaviria, gobernador de Antioquia.
Cuando el niño de 6 años cumplía 36 días de desaparecido agentes de la Fiscalía y de la Policía encontraron sus restos en la vereda Cuturú Alto de la citada población del Nordeste antioqueño. Las coordenadas del sitio las habría dado uno de los seis capturados por este caso.
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“Este hallazgo se hizo porque se tenía información sustraida de la investigación que está adelantando la Fiscalía”.
Aníbal Gaviria Correa, gobernador de Antioquia.
Sin embargo, aunque todos los indicios apuntan a que se trata de Maximiliano, el mandatario seccional aclaró que la identificación definitiva del menor se hará tanto con elementos físicos, como por pruebas de ADN que se realizarán en Medicina Legal. Allí también se establecerán las causas de la muerte del pequño.
Gaviria indicó que la noticia se debe mirar en dos facetas. Una es el final de la angustia de las comunidades de Remedios y de Segovia porque se hallan los restos del niño. La otra es que se recibe con mucha tristeza porque siempre se conservó la esperanza de hallarlo con vida.
Los sospechosos de la desaparición de Maximiliano están en la cárcel
A pesar de que se declararon inocentes, los seis capturados por la desaparición de Maximiliano Tabares Caro fueron enviados a la cárcel.
Recordemos que son ellos Sandra Patricia Caro Pérez y de Fabio Andrés Carmona Ramírez, madre y padrastro del niño de 6 años. Además de Dámaris Estela Pérez Escalante, la abuela. Además de Robinson Esmit Arboleda Ramírez, alias Orejas; Fabián Alberto Monsalve y Susana Ceballos Zapata. Todos integrarían la secta satánica ‘los Carneros’.
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Ellos fueron judicializados por delitos como desaparición forzada agravada y tortura agravada. En unos casos fue como autores y en otros como cómplices. Sin embargo, ahora el proceso cambiará de rumbo porque deberán responder por homicidio.
Recordemos que Maximiliano fue reportado como desaparecido por su mamá el pasado 21 de septiembre. Desde el principio las autoridades encontraron inconsistencias en sus declaraciones.
Testigos aseguraron que la última vez que vieron a Maximiliano fue el 20 de septiembre. Dijeron que iba en un motocarro con su padrastro, con su mamá y con alias Orejas por Segovia.
Al parecer, el niño fue sacrificado en un rito satánico para ubicar una guaca con oro, luego de que el padrastro, presuntamente, convenció a la familia de que el niño estaba poseído por espíritus.
