El presidente Gustavo Petro ha dicho, en varias oportunidades, que uno de los objetivos de su gobierno es entregar las tierras improductivas a los campesinos y afectados por el conflicto armado.
(Petro anunció que declarará emergencia nacional por el invierno).
De hecho, este sábado, se realizó la primera entrega de la finca Támesis en Montería, Córdoba, que en algún momento perteneció al exjefe paramilitar, Carlos Castaño, quien fue asesinado en 2004.
«Entrego la finca que ocupó Carlos Castaño cerca de Monteria a 50 familias campesinas. Aqui comienza la reforma agraria», escribió Petro en Twitter.
“La entrega fue liderada por la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y el Fondo de Reparación de la Unidad para las Víctimas con el propósito de reivindicar a una organización campesina emblemática de la región que ha sufrido los rigores de la guerra; fortalecer las economías campesinas, familiares y comunitarias; la producción de alimentos y el cierre de brechas”, señaló el Gobierno.
Según el Gobierno Nacional, las 590 hectáreas que estaban en poder de la familia Castaño se encuentran en proceso de extinción, y tienen un avalúo catastral de $8.503.
(Ecopetrol: esto dice el gobierno por cambios a la Junta Directiva).
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