En cuestión de seis horas, aproximadamente, el confeso asesino Miguel Ángel Torres Socarrás mató a trancazos a tres mujeres de la familia Kaled en la casa de estas, en Barranquilla. Un caso que se compara con el de la matanza de habitantes de la calle en la Universidad Libre.
Era el 5 de marzo de 1984 y, en la capital del Atlántico, el fervor por las fiestas del Carnaval estaba a tope. En las calles, la gente despedía la Gran Parada y se preparaba ese día el tercer día de…