A mediados de abril pasado, el Hospital Universitario San Jorge de Pereira le reportó a la unidad de Salud Pública de la Secretaría de Salud de Risaralda que atendía a una niña embera de dos años de edad, a quien se le había practicado la ablación y, además, tenía signos de haber sido abusada sexualmente.
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Ese caso encendió las alarmas entre los funcionarios de esa dependencia…