Una tragedia sacudió al departamento del Cauca en la madrugada del domingo 13 de agosto, cuando una subestación de Policía en el corregimiento de Timba, en el municipio de Buenos Aires, fue víctima de un devastador ataque con un coche bomba. El despiadado acto de violencia cobró la vida del subintendente José Carmelo García Gómez, un valiente oficial adscrito a la Unidad Básica del departamento de Carabineros.
El subintendente García, de 43 años, enfrentó su última y fatídica batalla cuando el carro bomba detonó con fuerza cerca de la subestación policial. Como resultado del ataque, el uniformado recibió impactos de bala en el área del tórax, heridas que lamentablemente resultaron fatales. A pesar de los esfuerzos incansables del personal médico por estabilizarlo en una ambulancia, la vida del valeroso oficial se desvaneció en medio de la tragedia.
Las autoridades han indicado que esta región del país ha estado bajo la influencia de una comisión del Estado Mayor Central de las Farc, específicamente del frente conocido como ‘Jaime Martínez’. El ataque no solo se cobra la vida de un destacado miembro de las fuerzas de seguridad, sino que también refleja la persistente amenaza que el terrorismo y la violencia representan en ciertas áreas del país.
El subintendente García Gómez será recordado no solo por su servicio dedicado a la comunidad y su valentía en la línea de deber, sino también por su sacrificio en la lucha contra la criminalidad y el terrorismo. Su pérdida deja un vacío en la institución policial y en el corazón de quienes lo conocieron y apreciaron.
Este trágico incidente es un recordatorio de la importancia de continuar trabajando incansablemente para garantizar la seguridad y la paz en las comunidades afectadas por actos de violencia. Las fuerzas de seguridad y la sociedad en general reafirman su compromiso de enfrentar el terrorismo y trabajar juntos en la construcción de un país más seguro y resiliente.