La víctima fue baleada justo al lado de un bicitaxi en el que al parecer se estaba movilizando.
“Es difícil que alguien sepa verdaderamente qué pasó porque a esa hora por acá no camina nadie y los que llegan, lo hacen en carro. Esta zona por la noche es bien pesadita y todo el mundo prefiere evitar arriesgarse a que algo les pase.
Yo por lo menos me enteré fue hasta esta mañana porque los vecinos estaban comentando que habían escuchado disparos y que la noche había estado jodida, que la Policía había venido a hacer levantamiento y todo”, nos comentó una vendedora del sector de fronterizo entre los barrios Porvenir y Atalayas (de Bosa), en donde la noche de ayer un hombre de 32 años fue asesinado luego de recibir al menos tres disparos en medio de lo que se configuraría como un nuevo hecho sicarial ocurrido en las calles de la localidad 7 de la ciudad.
En el punto del ataque, una zona residencial en la que confluyen varios conjuntos, hay hermetismo por lo sucedido y, de acuerdo con varios vecinos del sector, se sienten “cercados por la delincuencia”.
¿Qué pasó?
Al cierre de esta edición no había una versión que diera cuenta exacta de lo sucedido la noche de este martes pasadas las 10:15 p.m.. Se sabe que la víctima, quien fue identificada por las autoridades como Starlyn Josue Torres Murzzi, ciudadano venezolano de 32 años, fue abordado por un sujeto que se movilizaba en una motocicleta, quien una vez identificó a su víctima se acercó y procedió sin compasión.
El eco de 5 disparos (algunos vecinos dicen que fueron 3) se extendió entre los parques y callejones de la zona tan rápido como se esparcen las malas noticias. Y esta, en efecto, era una pavorosa: el hombre cayó malherido luego de que el sicario halara el gatillo; apenas alcanzó a cubrirse, pero el ataque fue a quemarropa.
Lo que dice la Policía
“Lo que están diciendo es que el finado era mototaxista, pero yo quiero decir algo: acá todos los mototaxistas de esta zona nos conocemos entre nosotros y él no trabajaba en esto. Él murió al lado de un mototaxi, eso es cierto, pero lo que nosotros pensamos es que él iba como pasajero y ahí le cayeron y le dispararon”, nos aclararon, la mañana de ayer, un grupo de varios jóvenes que se encontraban a pocos metros de la escena del crimen.
De acuerdo con el teniente coronel Alejandro Rodríguez, “las primeras investigaciones dan por indicio que el hoy fallecido posiblemente se dedicaba al comercio de estupefacientes. En este momento la Sijín y la Sipol de la Policía Metropolitana de Bogotá se encuentran realizando la verificación de cámaras y algunos testimonios del sector”.
Así las cosas, la hipótesis que las autoridades manejan refiere que el crimen se habría presentado en un contexto de ajuste de cuentas entre bandas dedicadas al microtráfico que se disputan el control territorial del mercado ilegal a sangre y muerte.
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