El cierre generó malestar entre las comunidades que se quejaron al perder la oportunidad de dialogar de frente con el director Salamanca
Los manteles se quedaron tendidos y el friche se enfrió, lo mismo que el chivo asado con el que se quería halagar al general William René Salamanca, director nacional de la Policía porque el alto oficial decidió quedarse en la capital del País atendiendo otros compromisos, debido a que recibió información en el sentido de que en La Guajira había una protesta con cierre de vía que impediría su paso al sitio donde estaba programado su encuentro con la comunidad y las autoridades locales.
El equipo de seguridad del director nacional de la institución armada le dijo al general que había presión en la península por diferentes sectores que se habían tomado las carreteras. Varios puntos estaban bloqueados, uno de ellos era la entrada a Mayapo y el otro en la bifurcación que separa las vías que conducen a Pancho y la que sigue para Mayapo.
Allí cerca de treinta nativos y un grupo de afrodescendientes conductores del transporte público de pasajeros reclamaban seguridad porque en las últimas semanas han sido acosados por delincuentes comunes que disparan a matar si no se detienen para dejarse atracar.
«Las autoridades les pidieron a estos sectores que permitieran el paso libre, no solo de la caravana del general William René, sino de todos los usuarios de la vía donde estaban los invitados a la ceremonia en la que se debatiría el asunto de la seguridad en la carretera y los atracos. También le queríamos plantear al general el asunto de continuos atracos y extorsiones que se vienen cometiendo en contra de ganaderos y propietarios de fincas de la región, ellos están cansados del acoso continuo de los delincuentes«, dijo la senadora Martha Peralta Epiayú, una de las personas que gestionó la llegada del general Salamanca, la cual terminó frustrada esta mañana del miércoles.
En el área de eventos del Internado Laachón, donde se desarrollaría la reunión estaban cerca de 150 personas entre autoridades tradicionales, líderes sociales, estudiantes, profesores y una regular cantidad de policías que debían cuidar la seguridad de Salamanca. En este mismo sitio una de las personas de la comunidad de Mayapo se quejó por la actitud asumida por los que protagonizaron la protesta y cierre de la carretera. “Hemos perdido la oportunidad de poder reclamarle de frente al general que fortalezca la seguridad de nuestra comunidad y la de otras personas que desarrollan labores en diferentes zonas de la península”, dijo la mujer en su traducción del wayunaiki.
Pese a todo, el tiempo no fue perdido, porque se produjeron intervenciones de la senadora Martha Peralta, la del secretario de Gobierno del departamento, un vocero de la comunidad y el propio comandante de la Policía del Departamento, quien además de entregar la excusa y un saludo del director nacional, se refirió los planes que se tienen para nuevas estrategias que contengan crecimiento de la seguridad ciudadana, tanto en las zonas rurales como las urbanas.
A la zona del evento no se hicieron presentes el alcalde en ejercicio ni el electo y tampoco hubo presencia del secretario de Gobierno o de otra cartera pese a que se encontraban en su jurisdicción, donde ellos ejercen su autoridad.
