El personero de Villavicencio, Jairo Andrés Becerra, convocó a una mesa de trabajo especial para revisar el estado de ejecución del contrato 2546 de 2023, por el que se pretende mejorar de manera preventiva y correctiva el sistema de semaforización.
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Este contrato, adjudicado a mediados del año pasado por valor cercano a los $3.300 millones, no registraría el avance físico que se indica en los documentos adjuntados en el Secop.
Según Becerra, al contratista le corresponde instalar gabinetes de control, cajas y tapas de inspección y hasta semáforos nuevos, lo cual no ha ocurrido pese a que en actas parciales se indica un avance de obra del 50 %.
“Estos documentos creemos que pueden tener alcance penal, disciplinario y fiscal, porque vemos que la información que allí consignaron puede ser inexacta, no obedece a la realidad”, indicó el servidor público tras constatar el estado de las 96 intersecciones semafóricas de la ciudad.
Entre otras cosas, a Becerra le preocupa la solicitud de una adición por cerca de $1.300 millones para este sospechoso contrato.
Así las cosas, advirtió que la Personería analiza la procedencia de compulsar copias a la Fiscalía General de la Nación, a la Contraloría municipal, e iniciar procesos disciplinarios contra los servidores públicos y contratistas involucrados.
El alcalde Felipe Harman terminó su mandato dejando la movilidad de la ciudad sumida en el caos: sin semáforos y con una malla vial en condiciones precarias.