Esta semana comenzó el debate sobre la hoja de ruta que seguirá Bogotá durante los próximos cuatro años, puesto que la administración del alcalde Carlos Fernando Galán radicó el Plan Distrital de Desarrollo 2024-2028, “Bogotá Camina Segura”, el cual, en temas económicos ya se alista para su debate por parte del Cabildo de la ciudad.
Lo primero que hay que decir es que este proyecto, compuesto por 180 artículos y casi 500 páginas, se fundamenta en cinco pilares que tienen como objetivo mejorar la calidad de vida de la ciudadanía bogotana, para lo cual se enfocarán en generar mayor seguridad, inclusión, libertad, igualdad de oportunidades y un acceso más justo a bienes y servicios públicos, fortaleciendo el tejido social.
Durante la presentación de este documento, el alcalde Galán fue enfático en decir que “la política no se fundamenta en imponer una visión, por el contrario, la política es concertación, diálogo, construcción colectiva, y además entender que hay diferentes visiones con el propósito de armonizarlas para que se conviertan en proyectos de ciudad”.
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Uno de los primeros temas que se revisa siempre que un nuevo gobierno presenta su plan de desarrollo, es saber cuál será el manejo tributario que dará a la gente, ya sea una ciudad o un país. En este caso, para la capital de la República, esta administración proyecta dos nuevos impuestos que desde ya prometen un fuerte debate.
En primer lugar está el impuesto al alumbrado público que, de aprobarse este proyecto, pondría a los bogotanos a pagar por este servicio que actualmente recae en su gran mayoría en las arcas del Distrito. Es el artículo 148 y allí dice que la base gravable para este tributo “será el valor facturado mensualmente por concepto del servicio público domiciliario de energía eléctrica en el Distrito Capital”.
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Uno de los primeros en dar a conocer esto fue el concejal Daniel Briceño, quien también es ponente del Plan de Desarrollo y en diálogo con portafolio explicó que este será un cobro que se hará dependiendo del estrato del hogar y la razón social del predio.
“El sujeto pasivo es aquella persona que vive o reside en Bogotá, que trabaje o que tenga una oficina, que tenga una residencia además, que pague el recibo de la luz y que va en una tasa hasta el 10% del recibo mensual. Esto para bienes de carácter industrial y comercial, y los bienes de carácter residencial pues pagarán entre tarifas de 5%, 6%, 7% y 8% dependiendo del tipo de estrato. Los únicos que no pagarían son los estratos 1 y 2”, explicó Briceño.
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Frente a esto, el concejal ponente advierte que “creemos que es un mal mensaje, además porque todos sabemos que el tema de energía se va a encarecer en el país por el tema de la sequía, porque nos toca usar energía térmica, porque nos toca usar tecnologías que son mucho más costosas que la hidroeléctrica y entonces creo que sería un golpe fuertísimo para la ciudadanía este impuesto al alumbrado público”.
Impuesto a estacionamientos
El segundo tributo nuevo que establece el Plan Distrital de Desarrollo está consignado en el artículo 149 y se titula “contribución por el servicio de estacionamiento fuera de vía”. Con este se busca poner un pago adicional a todos aquellos que usen parqueaderos públicos en la ciudad, con el fin de lograr recursos para la ciudad.
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Este artículo dice que la “tarifa de la contribución por el servicio de estacionamiento fuera de vía. La tarifa de la contribución por el servicio de estacionamiento fuera de vía será del diecisiete por ciento (17%.)”.
El recaudo de este tributo se hará mediante retención en la fuente, que deberá practicarse en el momento en que se realice el pago del servicio de parqueo por parte del sujeto pasivo al operador y corresponderá al ciento por ciento (100%) del valor de la contribución. Serán agentes retenedores de la contribución los operadores de este servicio.
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“Una persona que pague $10.000 en un parqueadero, pagará $1.900 de IVA y pagará $1.700 más de este impuesto a los parqueaderos, y pues la tarifa como tal del parqueadero. Esto creemos que es un mal mensaje, puesto que es un nuevo golpe para el tema de los carros. Nuevo golpe para la gente que tiene carros, siempre son los que terminan pagando”, explicó el concejal Daniel Briceño.
Se espera que el cabildo distrital comience la discusión de este proyecto muy pronto, con el fin de determinar si de da vía libre o no la hoja de ruta que plantea la Alcaldía de Bogotá y que tendría un costo, los próximos cuatro años, de $142 billones.