Cuando la peruana Mariel Reyes renunció a su puesto en el Banco Mundial, después de 10 años de labores, no sabía exactamente qué haría, pero tenía claro que quería cambiar el mundo, en especial para las mujeres y jóvenes. Al mudarse a Brasil, sin hablar portugués ni ser experta en tecnología, fundó {reprograma}, una iniciativa para enseñar programación a mujeres negras y trans, en situación vulnerable.
Además, la economista…