El pasado 24 de enero, el presidente Gustavo Petro y su gabinete ministerial decretaron el estado de conmoción interior en la región del Catatumbo, con el fin de hacer frente a la crisis económica y social que viven los habitantes de esta zona, por culpa de la ola de violencia y conflictos entre la guerrilla del ELN y otros grupos criminales.
Posteriormente, el 14 de febrero de este mismo año, se dio a conocer el decreto 0175, mediante el cual “se adoptan medidas tributarias destinadas a atender los gastos del Presupuesto General de la Nación necesarios para hacer frente” a dicho estado excepcional y desde entonces, ha comenzado un debate nacional sobre los efectos de dicha norma.
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Un reciente informe de la firma Crowe Co aborda este tema y sostiene que habría al menos seis impactos directos al bolsillo de los colombianos, además de cambios en las reglas de juego para cuatro sectores productivos importantes, que derivarían en pérdida de competitividad, caída de la inversión, golpes al costo de vida y el fortalecimiento de la desaceleración que se vive desde hace meses.
Pedro Sarmiento, socio director de impuestos y servicios legales de Crowe Co, y autor del informe, dice que esta medida, que busca recaudar $3 billones de pesos aproximadamente para el Catatumbo, el área metropolitana de Cúcuta y el departamento del Cesar, impone nuevos impuestos temporales a diversos sectores clave de la economía, cuyo efecto no ha sido revisado con detenimiento.
Conflicto en el Catatumbo
EFE
“Estas medidas, lejos de aumentar el recaudo que necesita el gobierno Nacional, podrían tener un efecto bumerang, frenando la inversión, reduciendo la actividad económica y aumentando la evasión fiscal”, manifestó.
Juegos de suerte y azar online
Partiendo de un termómetro en el que clasificó los impactos como “muy alto”, “alto” y “medio-alto”, el análisis comienza por los juegos de suerte y azar en línea, para los cuales asegura que generará un aumento en el costo para los usuarios, reducción en los ingresos para las empresas, mayor carga administrativa y aumentará los riesgos de evasión.
De igual forma, señalan que el número de jugadores en plataformas de apuestas en línea podría disminuir debido a varios factores como la elasticidad precio de la demanda, que en mercados similares ha mostrado un rango de -1.2 a -2.0. Esto significa que un aumento del 10% en los costos reduce la demanda entre un 12% y 20%.
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Así las cosas, con la implementación del IVA del 19%, se espera una caída proporcional o incluso mayor en la cantidad de clientes activos. Esto sin contar con la competencia con plataformas ilegales o extranjeras no registradas, dado que en países donde se han aplicado impuestos similares, hasta un 30% de los jugadores han migrado a mercados no regulados en busca de costos más bajos.
Extractivos e industria
Por otra parte, Pedro Sarmiento se refirió también al nuevo Impuesto Especial del 1% sobre la venta interna y exportación de hidrocarburos y carbón, y advirtió que incrementaría sus costos operativos entre un 2,2% y un 2,3%, reduciendo las inversiones extranjeras entre un 10% y un 15%, mientras que la no deducibilidad del tributo en tratados internacionales, también afectaría directamente los ingresos brutos de las exportaciones, incrementando la evasión fiscal hasta en un 10%.
“Esto sin contar con la pérdida de competitividad internacional, que oscilaría entre el 3% y el 5%. Asimismo, se prevén mayores dificultades para realizar proyectos extractivos, reduciendo la producción entre un 5% y un 8%, impactando el empleo en las regiones que dependen de este sector”, agregó.
Catatumbo.
AFP
Entre tanto, sostiene que la implementación del Impuesto de Timbre incrementaría la carga fiscal de las empresas del sector de la construcción entre 1% y 1,5%. Igualmente, se espera un aumento en los costos de financiamiento de entre el 20% y el 30%, reduciendo la ejecución de obras públicas y privadas hasta un 15%.
“Esto impactaría directamente la compra de vivienda, disminuiría entre 5% y 10%, y bajarían las inversiones en infraestructura entre un 20% y un 25%, afectando la generación de empleo y el crecimiento del sector”, dijo el vocero Crowe Co.
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Tomando como referencia el Impuesto de Timbre sobre las operaciones financieras elevaría sus compromisos tributarios entre un 1% y 1,5%. Esto impactaría la rentabilidad (hasta un 5%), incrementaría la carga administrativa (5% al 8%), reduciría las solicitudes de nuevos créditos (20% al 25%), y disminuiría la inversión extranjera (hasta un 30%).
Golpes al bolsillo
Con todo lo anterior, desde Crowe Co también abordaron los efectos del decreto de conmoción interior en el bolsillo de los colombianos, comenzando porque los usuarios de plataformas de apuestas en línea recibirán menos dinero para jugar, ya que el IVA del 19% se descontará del monto depositado.
Otro efecto importante será el aumento de la carga impositiva sobre el sector minero energético, lo que podría traducirse en un incremento en el precio de la gasolina y el diésel, ya que esto impactará el costo del transporte y los productos básicos, generando presión sobre la inflación.
Recesión
iStock
Adicionalmente, la electricidad subiría en regiones donde el carbón es clave en la generación de energía, encareciendo los servicios públicos y afectando a hogares y empresas; mientras que el costo del crédito también se vería afectado, ya que los bancos podrían trasladar el nuevo impuesto a los clientes mediante tasas de interés más altas o nuevos costos administrativos.
“Esto haría que los créditos hipotecarios y de consumo sean más costosos. Asimismo, las constructoras que financian proyectos con crédito enfrentarán mayores costos, elevando el precio final de la vivienda y dificultando el acceso a la compra de inmuebles, impactando el sector inmobiliario”, destacaron.
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Por último, las medidas del decreto de conmoción interior podrían tener un impacto negativo mayor al esperado, pues se afectaría de manera preocupante el empleo, la inversión, la producción y la estabilidad económica del país, exacerbando fenómenos como la desigualdad social y la pobreza en varias zonas del territorio.
“Las regiones más impactadas serán aquellas donde la extracción de hidrocarburos y carbón representa una parte significativa del PIB local y del empleo, entre ellas, el Catatumbo (Norte de Santander), los municipios de La Jagua de Ibirico, El Paso y Becerril (Cesar), El Cerrejón, Maicao y Albania (La Guajira) y los departamentos del Meta, Casanare y Arauca, que viven principalmente de la explotación de gas y petróleo”, señaló Sarmiento.
Así las cosas, el estudio de Crowe Co cerró prendiendo las alarmas por lo que podría significar un aumento de la migración forzada en ciudades como Bogotá, Medellín y Barranquilla, a raíz de la disminución de oportunidades laborales en los departamentos afectados por el conflicto actual, profundizando aún más la desigualdad urbana y sobrecargando los servicios públicos en estos centros urbanos.
