En el 2023, más de 1,6 millones de colombianos salieron de la pobreza según las más recientes cifras del Dane, que en una nueva actualización de este panorama mostró que quienes dejaron esta condición se fueron en su mayoría para la clase media y de vulnerabilidad, mientras que la clase alta quedó casi igual al 2022.
Según la autoridad estadística nacional, basada en la actualización de los valores de corte de la metodología de López-Calva y Ortiz-Juárez (2014) y adaptada para las condiciones del país el año pasado, los pobres se identifican como aquellos con un ingreso per cápita inferior a la línea de pobreza monetaria ($435.375).
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Entre tanto, los vulnerables se clasifican como aquellos con un ingreso per cápita mensual entre la línea de pobreza y $853.608, mientras que la clase media incluye a aquellos con ingresos per cápita entre $853.608 y $4.596.352.
Por último, la clase alta está conformada por personas con ingresos superiores a $4.596.352 mensuales.
Pobreza en Colombia
Santiago Saldarriaga. EL TIEMPO
Cambio en la distribución
Las cuentas del Dane arrancaron recordando que en 2023, el 33% de la población residente en el país se encontraba en condición de pobreza monetaria. Es decir, sus ingresos estaban por debajo de los $435.000. Esto representa una disminución de 3,6 puntos porcentuales (p.p.) frente a 2022 cuando fue 36,6%.
Dicho de otra forma, 1,6 millones de colombianos empezaron a tener ingresos por encima de la línea de pobreza. Así mismo en las cabeceras municipales el balance fue del 30,6%, registrándose una disminución de 3,2 p.p. en comparación con el año pasado, mientras que en los centros poblados y rural disperso la pobreza monetaria presentó una reducción de 4,7 puntos porcentuales, pasando de 45,9% a 41,2%.
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En este punto vale la pena destacar que las ayudas del Estado fueron fundamentales para esta mejora, ya que sin estas las cifras hubieran sido 1,2 millones más altas de las observadas en los recientes reportes. Si a los registros de pobreza se le suman la pobreza monetaria extrema, el panorama muestra que 4 de cada 10 colombianos enfrenta condiciones de vida desfavorables.
Sube la clase media
Tomando los rangos de ingresos que estipuló el Dane para la actualización de pobreza por clases sociales, se aprecia que gran parte de las personas que salieron de esta condición, pasaron a la clase media y a la situación de vulnerabilidad. En 2023, el 33% de la población del país se encontraba en condición de pobreza, el 31,5% en situación de vulnerabilidad, el 32,4% en la clase media y el 3,1% en la clase alta.
“En las cabeceras se registró que el 30,6% de las personas se ubicaron en situación de pobreza, el 26,7% como vulnerables, el 38,8% en la clase media y el 3,9% en la clase alta. Finalmente, en los centros poblados y rural disperso se evidenció que el 41,2% de la población en este dominio se encontraba en condición de pobreza, el 47,6% en situación de vulnerabilidad, el 10,8% se ubicó en la clase media y el 0,4% pertenecía a la clase alta”, agregó el Dane.
Esto quiere decir que mientras el número de pobres cayó en 1,6 millones, el sector de vulnerabilidad aumentó en 562.000 personas y la clase media subió en 1,4 millones de colombianos. Para la clase alta, es decir aquellos que viven con más de $4,5 millones al mes, pasó de 1,4 millones en 2022 a 1,5 millones de personas en el 2023.
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De acuerdo con los expertos, los hogares en condición de vulnerabilidad son todos aquellos que viven con menos de US $10 dólares por día ($45.000), nivel de ingresos que los mantiene en riesgo de caer a la pobreza; por lo cual son un sector de la población que requiere atención especial por parte de las autoridades.
Cambios por regiones
Otro de los enfoques presentados por el Dane en este informe es el discriminado de cambios en las clases sociales por ciudades, donde se aprecia que Medellín, Barranquilla y Bogotá tuvieron crecimientos notables de la clase media, mientras que la vulnerabilidad se disparó con fuerza en territorios como Cúcuta.
Bogotá
Mauricio Moreno / Portafolio
En el caso de la pobreza, las caídas más fuertes se dieron en Bogotá (-326.000), Barranquilla (-117.000), Medellín (-75.000) y Cúcuta (-67.000); mientras que Villavicencio (10.000), Valledupar (9.000) y Popayán (4.000); fueron las únicas tres ciudades capitales en las que este flagelo creció.
Así mismo, para el caso de la vulnerabilidad, Bogotá (-50.000), Medellín (-29.000) y Manizales (-5.000); tuvieron las caídas más fuertes y en contraste, Cúcuta (32.000), Barranquilla (22.000) y Santa Marta (10.000) se caracterizaron por crecimientos más fuertes entre 2022 y 2023.
Ahora bien, en lo que concierne a la clase media, categoría que tuvo las variaciones más pronunciadas, nuevamente Bogotá aparece con el cambio positivo más notorio (362.000), seguido por Medellín (143.000), Barranquilla (99.000) y Cúcuta (41.000). Caso contrario pasó con Villavicencio (-7.000) y Valledupar (-2.000); únicas dos ciudades donde la clase media se contrajo el año pasado.
Por último, para la clase alta, es decir quienes viven con más de $4,5 millones al mes por persona, el rango de personas aumentó en Bogotá (80.000), Medellín (27.000) y Barranquilla (18.000), mientras que se redujo en Cali (-11.000), Villavicencio (-3.000), Pereira (-2.000) y Popayán (-1.000).
