En los últimos días, una terrible denuncia sacudió a la ciudadanía en Bogotá, pues se destapó uno de los casos más impactantes de abuso sexual de menores: se trata de un profesor de un colegio distrital del sur, quien consiguió manipular durante años a niñas de entre 13 y 14 años para abusar de ellas. Según las víctimas, el hombre incluso recibió el apoyo de su esposa.
Las denuncias fueron conocidas primeramente por el portal receptor de denuncias de abuso sexual, Bogotá Exotérmica. Sin embargo, antes de eso una denunciante había iniciado un proceso por su cuenta que no vio futuro. Ahora son 9 los testimonios oficiales que la Fiscalía tiene en su poder (desde el pasado junio de 2020), de mujeres que hace diez años fueron abusadas por este sujeto, y que al alcanzar su madurez, se percataron de los delitos que el profesor cometió contra ellas, y lo peor de todo: supieron que este señor sigue dando clases y teniendo acceso a menores de edad.
Siniestra manipulación
El abogado penalista de las víctimas, Alexánder Rogelis, le contó a Q’HUBO las terribles estrategias que empleaba el docente (su identidad no puede ser divulgada para no entorpecer el proceso en su contra) para abusar sexualmente de menores, y con la complicidad de su pareja.
Según el relato de las víctimas, sobre el año 2003, un profesor de educación física del sur de Bogotá, quien tenía acceso a muchas niñas desde los 13 años, las invitó a que fueran parte de un club de danzas. Al inicio los ensayos eran en el colegio, pero más adelante las empezó a llevar a la casa. Cuentan que él se iba ganando su confianza y las iba manipulando psicológicamente a través de la enseñanza del hinduismo, el yoga y la danza”, comenzó el relato el abogado defensor.
“Aprovechándose de su ingenuidad, este tipo les metió a las niñas la idea de que para ascender en las artes del hinduismo debían realizar ciertas conductas que en todos los casos tenía que ver con actos sexuales no consentidos”, dice.
“Ellas accedían a tocamientos, incluso accesos carnales con tal de, supuestamente, subir de nivel y así equilibrar sus energías. Cuando empezó a llevar a las niñas a la casa, la esposa del profesor se encontraba allí. Cuenta una víctima que cuando una niña tenía alguna duda, porque no sabía si algo estaba bien o mal, llegaba la esposa a reforzar y a decirle que eso era normal, y que era parte de su teoría y su práctica”, agregó el jurista.
El profesor no solo se conformó, dicen las víctimas, con abusar de ellas, sino que también les habría tomado fotos desnudas y videos realizando ejercicios sexuales.
Muchas de ellas fueron educadas y vivieron su niñez a través de este profesor, teniendo en cuenta que muchas vienen de familias disfuncionales, encontraron en todo eso un apoyo. Pero cuando crecieron se dieron cuenta que eso no estaba bien. A muchas les quedaron secuelas psicológicas”.
Las víctimas también dijeron creer que este tipo habría seguido con sus artimañas, ya que los abusos iban de generación en generación, por lo que el abogado y las denunciantes piden acelerar el proceso que la Fiscalía tiene en sus manos desde el año pasado.
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