El arrojo de Ada la convirtió en uno de los perros del Ejército de Colombia más reconocidos. Durante varios años, esta labrador dorada caminó con valentía al frente de su guía para ubicar minas antipersonales, durante operaciones de erradicación de de cultivos ilícitos.
Pero en el 2021, Ada comenzó a perder su vista. El contacto con las plantas de hoja de coca, las cuales son impregnadas con químicos fungicidas, le quemó la conjuntiva y paulatinamente, comenzó a quedarse…