La fuerte sequía sigue afectando las fuentes hídricas en la capital tolimense, por lo que se pide seguir haciendo uso racional del agua.
Con la llegada del Fenómeno del Niño, Ibagué ha padecido las consecuencias que genera, como falta de lluvias en la parte alta de la cuenca del Combeima, aumento de las temperaturas y disminución considerable en los caudales de las fuentes hídricas que abastecen la ciudad.
Marco Matheus, director Operativo del IBAL, indicó que los niveles de captación del líquido vital no han sido los que se requieran para compensar el sistema, y debido a esto, el IBAL, ha presentado descompensación en sus tanques, generando intermitencia del servicio en algunos sectores de la capital tolimense.
“Para que el sistema funcione correctamente, necesitamos un almacenamiento de 28.000 a 29.000 metros cúbicos diarios, y en los últimos días, hemos amanecido con un almacenamiento de alrededor de 20.000 metros cúbicos aproximadamente”, explicó Matheus.
Para hacerle frente, la entidad adelanta un plan de choque para reparar las diferentes fugas que se registran y evitar pérdidas; de igual manera, se está analizando la posibilidad de instalar estaciones abastecedoras en algunas comunas.
“Agradecemos la comprensión y la paciencia de las comunidades, ya que el suministro no es el adecuado debido a las condiciones del Fenómeno del Niño. Por eso hacemos un llamado a la ciudadanía para que haga un ahorro y uso eficiente del agua”, concluyó el funcionario.
Recuerde que el IBAL tiene habilitada la línea: 3133931214, únicamente vía WhatsApp, para reportar novedades o fallar en el suministro de agua en su sector.