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Anacler Suescún, dirigente del “Colectivo Ambiental Arcabuqueño” sostuvo que, el pasado 15 de marzo, se les notificó a los habitantes del municipio la reactivación de la actividad minera a cielo abierto en la “Cantera Triturados La Esperanza” que se enfoca en la extracción para materiales de construcción, motivo por el cual la comunidad salió a marchar en contra de la decisión por las afectaciones que se podrían generar en zona hídrica de Arcabuco.
“La actividad minera se desarrollaría al frente de los nacimientos de agua Varuna en Arcabuco, que tienen el 99.9% de pureza, donde la mayoría de los ciudadanos de Tunja recogen este líquido vital, y además que surten a las veredas del municipio, así como a Moniquirá, parte de Gachantivá y Villa de Leyva. No vamos a permitir que se vuelva a abrir esta cantera”, expresó Anacler Suescún.
La “Cantera Triturados La Esperanza” socializaría el proyecto sobre las 2 p.m, sin embargo, el objetivo de la comunidad de Arcabuco en conjunto con habitantes del municipio de Gachantivá fue impedirla, tras ratificar lo perjudicial que sería para el ecosistema.
Anacler Suescún afirmó que se entregó un informe a Corpoboyacá para que se dé respuesta sobre el permiso del desarrollo de actividad minera para la entidad, “la explotación la solicitaron para 56 millones de metros cúbicos, pero como están ubicadas en zona de páramo, lo único que les permiten es 12 millones de metros cúbicos”, dijo.
