Por medio de una carta dirigida a la ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, el gremio de los arroceros alertó que los productores del sector vienen experimentando una disminución en el precio del arroz tipo Paddy, en las últimas tres semanas.
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Según explican, la preocupación está aumentando teniendo en cuenta que este tipo de arroz es el que paga la molinería, situación que está en riesgo ya que esta semana se inició la cosecha más grande del segundo semestre, que irá hasta mediados de octubre.
“Los precios que se están pagando en las diferentes regiones del país, están significando pérdidas de nuestros ingresos, teniendo en cuenta, por un lado, que los rendimientos han sido afectados por la severidad de las altas temperaturas en el primer semestre, y por el otro, que no hay a la fecha el incentivo al almacenamiento como herramienta alrededor de la cual se pueda acordar un precio mínimo de compra, como había existido históricamente”, aseguran en la carta.
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Por otra parte, destacan que si bien se inicia una cosecha grande, los inventarios de arroz que tienen los molinos, solo alcanzan para un mes de consumo, y es por ello que la producción estará ajustada a cubrir con normalidad la demanda nacional, y a guardar los excedentes temporales que requerirá el país para el consumo del primer semestre del 2025.
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“Sería ideal que exista el incentivo al almacenamiento, al menos para los productores, lo que nos daría la posibilidad de participar en este mecanismo con el fin de guardar parte de la cosecha. De no ser así, seremos los agricultores quienes asumamos con precios más bajos, el costo en que incurra la industria por almacenar el arroz que deberá guardarse en el país durante algunos meses”, dicen.
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Esto, para la Fedearroz, sería injusto con “miles” de agricultores y sus familias, quienes han persistido en esta actividad productiva, “a pesar de la ausencia de inversiones del Estado en distritos de riego, infraestructura de secamiento, vías y seguridad”.
Además reiteraron que sería injusto que el esfuerzo hecho a través de los años se vea comprometido tanto por las decisiones empresariales, como por la “ausencia de políticas gubernamentales”, que ponen en riesgo el sustento de las familias que dependen del sector.
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En medio de la misiva, el gremio de los arroceros pide que se implemente una ayuda gubernamental, buscando que se evite que los productores sean obligados a vender el arroz a precios que no cubren los costos de producción.
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“Instamos al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural a tomar medidas inmediatas para ofrecer un incentivo al almacenamiento de la cosecha, protegiendo nuestro sustento, y garantizando la seguridad alimentaria del país”, concluyen.
