Entre las muertes de Brian Humberto Garcera, Néider José Montenegro y Nixon Andrés Navarro solo hay unas horas de diferencia, pues su sicario se aseguró de que ninguno sobre viviera para contar la atroz historia que se esconde detrás de este triple asesinato.
Las tres víctimas, todas de nacionalidad venezolana, trabajaban en el sector del Siete de Agosto, en Barrios Unidos, vendiendo autopartes. Precisamente, el sábado salieron de su negocio con el fin de almorzar y tomarse algo después de medio día de jornada laboral, cuando su sicario llegó a ultimarlos.
En medio del movimiento que se estaba llevando a cabo sobre la 1:30 de la tarde por este sector, en donde la venta de accesorios para vehículo y
talleres están a la orden del día, estos tres sujetos llegaron a un restaurante que frecuentaban, pidieron una mesa de las que quedan al lado de la puerta y se sentaron.
No habían transcurrido más de 15 minutos, cuando una moto llegó hasta este lugar, se parqueó, el parrillero se bajó y se acercó a la mesa. Le disparó sin mediar palabra a los tres hombres en la cabeza y salió corriendo para subirse nuevamente a la moto que lo esperaba.
El tipo era un experto gatillero, porque a cada uno le dio un tiro en la cabeza y fue letal. Dicen que esos manes estaban metidos en problemas por una camioneta que les habían vendido. El sicario los siguió desde que salieron del negocio y apenas los vio sentados, cómodos y distraídos atacó”, le relató ayer a Q’HUBO un testigo del triple asesinato.
Hasta ahora no hay pistas de los pillos, tan solo los videos de las cámaras de seguridad que ya tienen las autoridades en su poder y con los que esperan esclarecer este hecho, pues una temible banda estaría detrás de estas muertes, perpetradas en la Carrera 28 con Calle 63C.
Reconstrucción de los hechos…
Brian Humberto falleció de un disparo en la cabeza minutos después del ataque, justo cuando ingresaba a cirugía en el Hospital Universitario San José Infantil. Por su parte, Néider José (24 años) y Nixon (28 años) murieron la noche de este sábado, sobre las 10:00 p.m., debido a la gravedad de las heridas.
Q’HUBO pudo conocer que estos tres hombres habían comprado hacía menos de un mes una camioneta que había sido hurtada, pero que en el momento en que el propietario los ubicó y se enteró que ellos la tenían comenzó a pedirla.
Los manes no quisieron devolver esa camioneta y pensaron que se estaban metiendo con cualquier bobo, entonces comenzaron a pedirle plata a cambio del carro, pero el tipo no se dejó sacar nada y los terminó mandando a matar”, manifestó una persona que conoció el caso.
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