El decrecimiento de 0,3% en la economía para el tercer trimestre de este año le cayó como un baldado de agua fría al Gobierno, que estaba ilusionado con el buen desempeño del primer semestre.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, contó que ese mal dato hizo que los técnicos de su cartera tuvieran que recalcular sus proyecciones, y ahora se espera que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) sea apenas de 1% para el cierre del año y no de 1,8% como se estimaba a mediados…