El bajo precio de la piña oro miel y las pocas ventas de la fruta impulsó a una familia en Lebrija a darle un mejor uso al alimento y de esta forma elaborar el único tequila de piña con sello santandereano.
La bebida, cuya preparación incluye un doble proceso de destilación y el aprovechamiento de la cáscara y el interior de la fruta se comercializa en dos presentaciones, una de 400 mililitros cuyo valor es de cincuenta mil pesos y otra de 780 mililitros que cuesta $80.000.
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“Hay que dejarlo dos meses de fermentación e irle dando su toque hasta que alcance su punto. Solo se puede hacer con la piña oro miel y lo estamos sacando al 38% de alcohol, sí emborracha pero no tiene químicos ni alcohol, todo se logra con la misma fruta”, dijo Isolina Niño, creadora de la curiosa bebida.
El tequila de piña, según sus elaboradores, también tiene propiedades curativas de algunas enfermedades como el COVID-19 y su particularidad es que aunque se trata de una bebida que puede generar embriaguez, no pierde su sabor a piña oro miel.
“A parte de ser licor es un remedio porque ayuda mucho, de hecho para mí también es una bebida sanativa y con muchas propiedades que vienen de la piña”, agregó Isolina Niño.
El novedoso licor elaborado por esta familia campesina del municipio de Lebrija se comercializa en los mercados campesinos que se hacen los domingos en la Universidad Industrial de Santander (UIS) de Bucaramanga.
El bajo precio de la piña oro miel y las pocas ventas de la fruta impulsó a una familia en Lebrija a darle un mejor uso al alimento y de esta forma elaborar el único tequila de piña con sello santandereano.
La bebida, cuya preparación incluye un doble proceso de destilación y el aprovechamiento de la cáscara y el interior de la fruta se comercializa en dos presentaciones, una de 400 mililitros cuyo valor es de cincuenta mil pesos y otra de 780 mililitros que cuesta $80.000.
“Hay que dejarlo dos meses de fermentación e irle dando su toque hasta que alcance su punto. Solo se puede hacer con la piña oro miel y lo estamos sacando al 38% de alcohol, sí emborracha pero no tiene químicos ni alcohol, todo se logra con la misma fruta”, dijo Isolina Niño, creadora de la curiosa bebida.
El tequila de piña, según sus elaboradores, también tiene propiedades sanatorias de algunas enfermedades como el COVID-19 y su particularidad es que aunque se trata de una bebida que puede generar embriaguez, no pierde su sabor a piña oro miel.
“A parte de ser licor es un remedio porque ayuda mucho, se mezcló con cola granulada y se tomó y ayudó muchísimo a salir bien, de hecho para mí también es una bebida sanativa y con muchas propiedades que vienen de la piña”, agregó Isolina Niño.
El novedoso licor elaborado por esta familia campesina del municipio de Lebrija se comercializa en los mercadillos que se hacen los domingos en la Universidad Industrial de Santander (UIS) de Bucaramanga o a través del número celular 3172884849.
