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Por Wilfrido Enrique Solano
La comunidad wayuu en general será la directa beneficiada, sobre todo la que tiene asiento en la zona de régimen especial aduanero, lo anterior porque el sitio donde estará ubicada será la ranchería La Paz una zona equidistante para Maicao, Uribia y Manaure a un lado de la carretera troncal del Caribe.
El espacio de 70 por 120 metros cuadrados fue donado por la estimada familia Ramírez; que pese a su amplio árbol genealógico, sus principales autoridades tradicionales están enlazadas de una u otra manera en el apoyo de este aporte beneficiario.
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Adalberto Dasuki un personaje de origen árabe; soñador, impulsor y emprendedor de la noble iniciativa; preconiza que luego de un corto cese en el proceso operativo tendiente a la intervención físico estructural del centro materno infantil, recientemente se protocolizó la recepción del lote dimensionado en unos 8.400 m2 donde funcionará también el centro de recuperación y rehabilitación de niños en grado moderado y severo de desnutrición.
El lote fue obsequiado en días recientes y su construcción apunta a la atención directa de los niños con problemas de desnutrición, cuyas cifras hablan de más de 5 mil infantiles en el último decenio.
Por lo anterior el plan de choque debe ser multidisciplinario e intersectorial, con captación de ayuda de todas las entidades públicas y privadas posibles sin ánimo de lucro ni asomo politiquero, porque el objetivo de esta causa es la humanización sin asomos burocráticos.
Al centro tendrán acceso los niños de La Guajira que lo requieran, tanto de la etnia wayuu como los alíjunas u occidentales, para lo cual se ha iniciado una campaña cuyo lema bandera es «construyendo conciencia para un mundo mejor» que consiste en una cartilla pedagógica de deberes, haberes, derechos humanos, prevención de la droga y el alcohol, y darle a conocer a jóvenes y adultos el oprobio que se vive al interior de un centro carcelario.
Dentro de las acciones inmediatas se ha proyectado una gira por Colombia, vendiendo y promocionando la manta y la mochila wayuu, cuyos ingresos ayudarán a sus comunidades y fabricantes de las mismas, y el excedente a manera de donación, ayudará a la construcción del centro materno infantil el cual se iniciará con un primer piso de 1.400 m2 en la ranchería La Paz.
El paraje es un sitio Campestre para el sosiego de los pacientes y el efectivo desarrollo de la actividad médica y administrativa, pero que servirá también como un oasis con visual turística.
El reconocido emprendedor Alberto Dasuki declaró a los medios masivos de Maicao, de manera cruda y enérgica que ese macroemprendimiento se sustenta en la falta de políticas públicas infantil en La Guajira, porque todo lo quieren inclinar hacia el roster de entidad pública territorial en lo que está comprobado que los organismos de control tuercen su función legal.
Agregó el líder humanitario y gerente del proyecto, que vienen trabajando en la prestación de servicios en una pequeña sede con el soporte de los permisos de MinSalud, el aval de la alta consejería presidencial para la niñez y la licencia de construcción de las instalaciones; Igualmente reconoció el apoyo de la gobernación del Atlántico, de lo que apuntó que es un gesto que los impulsa a seguir tejiendo esperanza.
