La Fundación Cerro Matoso conmemoró 43 años al servicio de la región y las comunidades, respaldada por el compromiso de la empresa con el desarrollo local. Originalmente llamada Fundación San Isidro, fue creada en 1981, un año antes del inicio de la producción de Cerro Matoso, logrando posicionarse en el departamento de Córdoba con su propósito de contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de la población.
La Fundación ha implementado modelos de programas sociales a partir de la identificación de las principales necesidades de la región, convirtiéndolas en iniciativas de formación y empoderamiento local, generando así los primeros proyectos de valor compartido que aún continúan beneficiando a la población y la economía local.
Uno de los primeros aportes a la comunidad fue la elaboración de un amplio trabajo de cartografía social, que permitió caracterizar y entender detalladamente el contexto, siendo esta información insumo para la posterior definición de las áreas de jurisdicción de unidades territoriales, en un proceso colaborativo con las comunidades y sus líderes; de manera que este ejercicio se convirtió en un referente para modelos de planeación territorial de otras fundaciones a nivel nacional.
En la época de los noventa, la Fundación amplió su enfoque para incluir a mujeres cabeza de familia, desarrollando un programa de acompañamiento socioeconómico, dejando un legado en Montelíbano, con la donación de un centro de entrenamiento para la alcaldía municipal de la época. Este programa incluyó asesorías y capacitaciones, acceso a estudios especializados y formación en la industria de la confección con el fin de fortalecer sus iniciativas productivas. Además, incursionó en programas de microcréditos destinados a pequeños empresarios, buscando el impulso económico local.
En el año 2014 la Fundación San Isidro (como fue denominada desde sus inicios) se convirtió en la Fundación Cerro Matoso que cuenta con un equipo interdisciplinario enfocado en productividad, infraestructura y educación, como prioridades para continuar atendiendo de manera integral y a través de proyectos de desarrollo comunitario, las necesidades y oportunidades dentro del área de influencia de la operación de Cerro Matoso.
Así mismo, la Fundación ha acompañado a Cerro Matoso en el desarrollo de proyectos claves y de alto impacto para la región, en alianza con entidades nacionales e internacionales, como por ejemplo la Alianza por lo Social y la Alianza por el Territorio, en la cual se desarrollaron iniciativas como la construcción del SENA del San Jorge, además de trabajar de la mano de la Gobernación de Córdoba y alcaldías vecinas en la intervención y mejoramiento de vías, por más de $3.000 millones de pesos en los últimos años, buscando así aportar a la seguridad vial en la región.
Solo en los últimos cinco años, la Fundación ha facilitado la ejecución de más de 400 proyectos de inversión social fruto de acuerdos entre Cerro Matoso y las comunidades en frentes como la adquisición de tierras y desarrollo de proyectos productivos; acceso a la educación superior, mejoramiento de viviendas y fortalecimiento organizativo y cultural. Cada proyecto es priorizado, estructurado y ejecutado de manera autónoma por las organizaciones comunitarias, contando con el acompañamiento de la Fundación.
A través de estos proyectos se busca promover la generación de capacidades y la autogestión como pilares para la disminución de la pobreza y la transformación positiva de las condiciones de vida de las familias.
“Desde Cerro Matoso y su Fundación, nos sentimos orgullosos del trabajo y compromiso genuino con el mejoramiento de la calidad de vida de las comunidades y territorio donde operamos. Juntos seguiremos trabajando por un futuro más brillante para todos”, informó la compañía en un comunicado.