En el marco del proyecto Urdiendo y Tejiendo Paz: Por la Defensa de los Derechos Humanos en Nariño, liderado en Nariño por la Corporación Ocho de Marzo como parte de la iniciativa Prodefensoras, impulsada por ONU Mujeres y financiada por la Embajada de Noruega, se seleccionaron cinco organizaciones que tienen como objetivo implementar una microcapitalización, acompañamiento y seguimiento en la implementación de proyectos enfocados en la construcción de paz y en la promoción de los derechos de las mujeres.
Adriana Villareal, representante legal de la Asociación ARARIWA, ubicada en el municipio de Cumbal, comentó sobre el impacto de esta oportunidad:
“Participar en esta microcapitalización nos brinda las bases para postularnos a convocatorias más grandes en el futuro. Este es solo el comienzo, y ha sido una experiencia muy enriquecedora. Aprendemos cada día, estamos en un constante proceso de preguntas y aprendizajes que podemos replicar con nuestra comunidad”.
Esta iniciativa busca fortalecer los conocimientos y capacidades de las lideresas y defensoras, potenciando la gestión y movilización de recursos en las organizaciones comunitarias, así como sus habilidades para formular e implementar proyectos de impacto social. Además, busca proteger y promover el liderazgo de las mujeres en sus territorios.
Desde La Unión, María José Pérez, representante de la Fundación Unión Diversa, destacó:
“Esta iniciativa nos permite, como organización de base, trascender más allá de nuestros territorios. Aunque hemos realizado acciones muy significativas, no siempre han tenido el impacto y alcance deseados. Ahora, con el apoyo del proyecto y los conocimientos adquiridos, podemos fortalecer nuestras capacidades y compartirlas en nuestra comunidad. De hecho, nuestro proyecto se centra precisamente en fortalecer los liderazgos juveniles y promover la construcción de paz a través de nuestros/as estudiantes”.
Con el desarrollo de las cinco iniciativas seleccionadas, se espera que las organizaciones logren fortalecer significativamente su impacto social, consolidando su experiencia en la gestión de recursos y optimizando su capacidad para planificar, ejecutar y dar seguimiento a proyectos que aborden las necesidades de sus comunidades, pero sobre todo que las voces de lideresas y defensoras se amplifiquen no solo en la región, sino también en el país.
Fuente y foto: ONU Mujeres