El sueño de caminar sin miedo, jugar al aire libre, regresar a las aulas y trabajar en paz comienza a hacerse realidad para miles de habitantes de las zonas rurales de Samaniego. Gracias al programa de Desminado Humanitario, impulsado a través de la Co-Construcción de Paz Territorial, ahora es posible dejar atrás el temor de perder a un ser querido por la activación de una mina antipersonal.
Esta iniciativa es liderada por el Gobierno Nacional, el Frente Comuneros del Sur, el Gobierno Departamental, la comunidad local y sobrevivientes de minas, mediante un proceso de diálogo y negociaciones que buscan desescalar el conflicto armado y transformar los territorios hacia la paz.
Durante el lanzamiento del programa, la comunidad tuvo la oportunidad de resolver dudas sobre las áreas prioritarias para las acciones de desminado y escuchar, de los propios comandantes del Frente Comuneros del Sur, un mensaje de perdón y reconciliación. Además, se brindó información clave sobre las zonas minadas para garantizar la seguridad y eficiencia de las operaciones, como parte del compromiso para reducir el conflicto.
Este primer esfuerzo humanitario en el país tendrá una duración de un año, durante el cual se realizarán trabajos de desminado en las zonas rurales de Samaniego, uno de los territorios más afectados por minas antipersonal, que lleva hasta la fecha un registro de 250 víctimas. El proyecto es financiado con recursos de cooperación internacional de Alemania y Estados Unidos, ejecutado por la Acción Integral Contra Minas Antipersonal (AICMA), y cuenta con el apoyo de la Organización de Estados Americanos (OEA) para la capacitación de nuevos desminadores.
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Fuente y foto: Gobernación de Nariño
