Trabajar en función de la educación ambiental, establecer un puesto de control ambiental en la zona y consolidar la compra de predios por parte de la Gobernación de Caldas, son las tareas que quedaron este martes tras la realización de mesa técnica del río Oro, afluente del que se abastecen 59 mil usuarios en el occidente próspero de Caldas.
“La idea es generar un sistema de información de la cuenca del río Oro, avanzar en estrategias de protección consolidadas y articuladas con los predios de la Gobernación, Empocaldas, el municipio de Riosucio y el resguardo Nuestra Señora Candelaria de La Montaña”, explicó Paola Andrea Loaiza Cruz, secretaria de Medio Ambiente de Caldas.
La mesa del río Oro surgió por las diferentes problemáticas que hay en la zona y por la inquietud que presentaron los alcaldes de los municipios del occidente próspero, que son los que se abastecen de esta fuente hídrica que nace en Riosucio.
“Queremos implementar estrategias asociadas a la cosmovisión del territorio indígena en el que se establecen los Territorios Indígenas de Conservación (Ticas)”, contó la secretaria de Medio Ambiente de Caldas.
Para el 28 de marzo quedó programado un recorrido por la cuenca del río Oro, pues las entidades, la comunidad y los grupos ambientales quieren reconocer la zona para impulsar las estrategias de conservación de esta fuente hídrica.
En mayo, además, será la próxima reunión de la mesa técnica, en la que las entidades deberán llevar las tareas adelantadas, así como un análisis relacionado con la propuesta que se viene mirando desde el suroriente antioqueño de establecer un área protegida regional.