Los nativos llegaron desde la Alta Guajira hasta la Gobernación en Riohacha porque en la alcaldía de Uribia les dijeron que no hay cómo ayudarles
La crisis que enfrentan los residentes de la Alta Guajira por la falta de agua para el consumo humano es quizás la más severa que han debido soportar en los últimos años, y según los testimonios, ya no alcanzan a sacar una gota ni en los lechos de los jagüeyes que se han secado y donde antes conseguían un poco del vital líquido.
La situación es casi catastrófica, pues cientos de niños debieron suspender las actividades escolares por la falta de agua en las sedes de varias instituciones etnoeducativas.
“No podemos seguir mandando a nuestros niños a clase en esas condiciones porque cuando les de sed no hay una manera para darles de beber, hemos tratado de buscar solución en la alcaldía de Uribia, pero allí ha sido imposible dialogar con el mandatario municipal y sus secretarios que podrían solucionar el problema, lo que nos han dicho algunas personas con las que logramos contacto, es que ellos no cuentan con los recursos para buscar soluciones”, dice Rosa López, una de las lideresas wayuu de la Alta Guajira.
Aguantamos la hambruna, pero no podemos con la sequía
Rosa López manifiesta que no se han dado en el momento, las condiciones para mejorar las condiciones de vida de quienes habitan esta parte de La Guajira. “Nosotros hemos aguantado la hambruna con un gran costo en vida, pero la sequía, si sigue como va, entonces sí existe el peligro de que desaparezcamos como raza nacional de Colombia”.
Dice que la mayor preocupación es la de los niños y han tocado las puertas de la oficina de Riesgos de la Alcaldía, pero les dijo enfáticamente que estaban con las manos atadas para buscar solución.
Indicó que no lograron hablar con los funcionarios competentes este lunes y por eso se fueron a la Gobernación en Riohacha, donde no pudieron entrevistarse con el gobernador ni con su secretario de Gobierno, pero el asesor Alberto Durán los atendió muy amablemente y consiguieron que, con la Defensa Civil, puedan enviar este martes o miércoles, por lo menos dos carrotanques cargados para llevarlos a dos sedes escolares y así reiniciar las clases.
Sector en grave crisis
La mayor crisis está en Punta de los Cocos, donde la comunidad y profesores decidieron paralizar clases y ahora ellos están esperando lo que pueda ofrecer el alcalde de Uribia, quien los había invitado a una reunión la mañana de este martes 2 de abril. “Lo vamos a escuchar a ver qué nos ofrece porque la verdad es que esta situación es una emergencia y solo hay ayuda para dos sedes escolares”, dice la mujer que representa a más de 200 autoridades.
La situación de las comunidades indígenas de la Alta Guajira es bien difícil y están a la espera de que la instancia municipal, la departamental y la nacional, puedan brindar el apoyo necesario para poder superar la profunda crisis de la que sostienen es más delicada que la hambruna que se ha llevado cientos de vida, pero ahora ven en riesgo a toda la etnia.