Las abejas silvestres en Colombia están en grave peligro de extinción, lo que pone en riesgo no solo la producción de miel, sino también la polinización de muchos cultivos esenciales para la alimentación humana. Así lo advirtió la docente e investigadora científica en el campo de la Biología, María Guiomar Nates Parra, en el marco del VI Congreso Colombiano de Zoología, en el centro de convenciones de Montería.
Según Nates Parra, la deforestación, el uso de insecticidas y los efectos del cambio climático están diezmando la población de abejas en Colombia. Aunque se cree que podrían existir al menos mil especies de abejas en el país, la investigadora estima que el 50 % de ellas están en gran peligro y han comenzado a desaparecer. Si las abejas desaparecen, muchos alimentos, como la maracuyá, lulo, badea, berenjena y otros, estarían en peligro en la mesa de las familias colombianas.
La expositora de la Universidad Nacional propuso algunas acciones concretas para detener la disminución de las poblaciones de abejas, como la reforestación, el cuidado del ambiente, la plantación de jardines con flores por parte de las amas de casa, el diseño de corredores biológicos en las ciudades y la minimización en la máxima expresión de la utilización de agroquímicos en el área rural.
El VI Congreso Colombiano de Zoología fue la plataforma de exposición de 911 trabajos distribuidos en 49 simposios, con la participación de al menos 900 asistentes de 460 instituciones y de expertos de 22 países. Además, se desarrolló el Primer Congreso Colombiano de Lepidopterología (mariposas y polillas), y se compartieron cinco charlas magistrales, cuatro de ellas internacionales. La organización del evento estuvo a cargo del programa de Biología de la Facultad de Ciencias Básicas de la Universidad de Córdoba.
