Apenas ha caído sobre la región de La Mojana sucreña un fuerte aguacero y ya los campesinos comenzaron a sufrir con la pérdida de 400 hectáreas de tierras cultivadas, la gran mayoría sembradas con padilla.
Son las llamadas lluvias de verano en la región y la emergencia llegó nuevamente a las familias que confiaban en salir adelante con de cultivo de patilla que sembraron.
Las primeras lluvias llegaron con toda su fuerza y donde anteriormente había tierra firme, ahora los…