Personal de la autoridad ambiental del Tolima Cortolima, encontró tres flamencos que estaban en fincas de Ibagué, los cuales fueron sacados de su hábitat natural y estaban en malas condiciones de salud.
Las acciones se realizaron de manera coordinada entre Cortolima, la policía ambiental, carabineros y guías caninos quienes llegaron a esos lugares tras las denuncias de la comunidad.
Es un hecho que genera preocupación debido a que, es una especie muy delicada y el tráfico de ella provoca grandes daños, pues a la hora de ser capturados pueden morir cerca de ocho a diez animales para que solo uno de ellos pueda ser vendido.
Delio Orjuela médico veterinario de Cortolima señaló que uno de los animales tenía un ala afectada y pododermatitis en sus patas, consecuencia de factores del suelo, ecosistema, y bacterias, lo cual puede causar futuras enfermedades.
Al tener estas afectaciones y cambios, las aves no pueden ser liberadas nuevamente en su hábitat natural y se han tenido que reubicar en CAFAM, un centro de atención donde serán acompañados por otros individuos, tendrán una dieta especial para mantener su color y hacerles seguimiento biológico, nutricional y clínico.