Ayer, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseguró que el precio del diésel no tendrá incrementos mientras esté subiendo la gasolina. El jefe de la cartera manifestó que “prefiero cerrar primero el precio de la gasolina y luego mirar el tema del diésel”.
(Vea: Diésel no subirá mientras aumente la gasolina, aseguró el Minhacienda)
El ministro explicó que la principal motivación para no hacer esta alza es no afectar de forma muy fuerte la inflación, que mencionó que no ha bajado al ritmo esperado, por cuenta de las alzas en combustibles. Destacó que su bien es una medida dolorosa, es necesario para hacer los ajustes fiscales.
“Este año podría quedar así el precio del diésel, pero todavía no es una decisión definitiva”, señaló.
Cabe recordar que el Acpm se mantiene desde hace meses en $9.065 por galón, mientras que la gasolina ha tenido fuertes incrementos y ya se encuentra en $12.364 tras dos ajustes de $600. En meses pasados el Gobierno señaló que en el segundo semestre subiría el precio del diésel.
Durante su presentación en el Congreso de Andesco, el ministro mencionó que inicialmente plantean la posibilidad de que el precio de la Gasolina Motor Corriente (GMC) suba por los próximos cinco meses, hasta llegar al precio de paridad internacional. Después de este punto, el objetivo es que el valor del galón “flote” a precios internacionales.
(Vea: Reformular precio del diésel, meta de Unidos)
Esto quiere decir que hasta diciembre el precio del diésel podría estar en el mismo nivel, y que hasta entonces la gasolina aumentaría.
Julio César Vera, presidente de Xua Energy, dijo que el diferencial del precio interno, frente al de paridad internacional es de $6.468 para el caso del Acpm y de $3.277 para la gasolina después de IVA y teniendo en cuenta las mezclas de biocombustibles.
Este sería el margen de alzas para los próximos meses. “La gasolina ha subido por la llegada del verano, como es habitual, así el precio del petróleo esté al mismo nivel de hace 15 días y la caída en la tasa de cambio ha compensado en alguna medida el mayor precio de este combustible”, aseguró Vera.
Esto implicaría que el diésel podría mantenerse estable hasta finales de año y posteriormente comience a aumentar.
El objetivo de estos ajustes es disminuir el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepc) que durante 2022 llegó a $36,7 billones y con los incrementos de este año se estima que las deudas de este año lleguen a $17,8 billones.
Esto está explicado principalmente por el subsidio a los precios del Acpm, que requeriría $13,8 billones, según cálculos del Ministerio de Hacienda. Los restantes $4 billones serían causados por la GMC.
(Vea: El ACPM representa cerca de 60 % del déficit del Fondo de Combustibles)
Para 2024 sin embargo, Hacienda plantea que haya un superávit en este fondo de $500.000 millones, tanto por el menor precio del barril de crudo como por un menor valor de la tasa de cambio.
Esto debido a unos ingresos de $5,4 billones por un sobre precio en la gasolina, mientras que el diésel aún requeriría de un subsidio de $4,9 billones, que jalonan el balance final del fondo. El gobierno propone que una vez se lleguen a precios internacionales, se elimine el Fepc para evitar estas deudas.
DANIELA MORALES SOLER
Periodista Portafolio