La gestora social compartió su trayectoria personal y profesional, demostrando que, con determinación y actitud positiva, es posible superar cualquier desafío.
Durante el último día de ExpoU 2024, la primera dama del municipio, realizó una conmovedora ponencia titulada «Del dolor al éxito». En su intervención, destacó la relevancia de ExpoU como un espacio vital para los jóvenes del Eje Cafetero, afirmando que este tipo de eventos no solo alimentan el intelecto, sino también el espíritu.
«Esto es algo maravilloso para Pereira porque es el espacio donde los jóvenes van a poder nutrir sus almas y su sabiduría para entender cómo es que deben tomar la decisión de educarse», expresó. Para ella, ExpoU es más que un encuentro académico; es un lugar donde los jóvenes pueden orientarse hacia un futuro lleno de logros a pesar de los desafíos que la vida les presenta. «La vida es de desafíos, pero esos desafíos finalmente se pueden superar», afirmó con seguridad.
Superando barreras
En su ponencia, María Irma Noreña compartió su experiencia personal, marcada por las dificultades y los aprendizajes. Su objetivo principal era transmitir un mensaje claro a los jóvenes: sí se puede, incluso cuando la vida pone obstáculos. “Para todos los seres humanos hay aprendizajes, hay desafíos, hay exigencias, pero que sí se puede”, afirmó, recordando a los asistentes que el éxito depende de mantener una actitud positiva y tener claridad en las metas.
Noreña también habló sobre su infancia y cómo fue criada por padres campesinos que la llenaron de amor y fortaleza. «Dios puso esos dos campesinos en mi vida y ellos supieron llenarme de amor», dijo con emoción, destacando que su familia fue un pilar fundamental en su camino hacia el éxito.
Lecciones de vida y resiliencia
A lo largo de su ponencia, María Irma Noreña hizo un reconocimiento especial a su padre, a quien describió como una figura esencial en su formación personal. “Ese hombre agradezco porque de lo que soy, gran parte se lo debo a ese varón, a mi padre”, comentó. Con este testimonio, quiso subrayar la importancia de valorar las raíces familiares y utilizar esos aprendizajes para avanzar en la vida.
Uno de los momentos más impactantes de su intervención fue cuando recordó cómo, a pesar de las dificultades para estudiar medicina y una fractura en la rodilla, encontró una nueva oportunidad en la línea comercial, graduándose como contadora. “Que negociazo es ser el mejor hijo”, dijo entre risas, haciendo alusión al compromiso y sacrificio que hizo para apoyar a sus padres mientras estudiaba y trabajaba.
El poder de la mente: una clave para el éxito
Noreña también destacó el papel crucial que ha tenido su mentalidad en su camino hacia el éxito. «Hay un instrumento muy poderoso que jugó un papel importante en mi vida y es mi cerebro», afirmó. Explicó cómo siempre ha enfocado su pensamiento en lo positivo y cómo ha sido cuidadosa en lo que permite que influya en su mente. “Todo lo que le metí a esta cabecita es lo que me permite ser exitosa”, aseguró, resaltando que la clave está en alimentar la mente con pensamientos constructivos.
“Si dejo que un tercero meta la información que él quiere, me puede enfermar, me puede dañar, me puede hacer daño”, advirtió, alentando a los jóvenes a ser selectivos con lo que permiten en sus pensamientos y decisiones. Finalmente, los invitó a tomar control de su mente: «Ustedes no van a permitir que lo que no quieran, entre».
Un cambio de rumbo
María Irma Noreña también compartió un giro importante en su vida académica. Durante su etapa escolar en el INEM, eligió la especialización en ciencias, ya que su sueño era convertirse en médico. Sin embargo, un accidente de motocicleta que le provocó una fractura de rodilla la obligó a dejar el colegio por un año. Al regresar, ya no había cupo en la opción de ciencias, y tuvo que redirigir su camino hacia el área comercial.
Insistió en: “Que negociazo es ser el mejor hijo”, expresó con orgullo al recordar cómo, mientras estudiaba, también respondió económicamente por sus padres, demostrando que el esfuerzo y el sacrificio por la familia siempre tiene recompensas.
Una lección final para los jóvenes
María Irma Noreña concluyó su ponencia refiriéndose a su esposo, el actual alcalde de Pereira, con quien ha compartido más de 30 años de vida. Desde jóvenes, ambos se prepararon y estudiaron juntos, enfrentando cada reto que la vida se encargó de ponerle. “Somos un complemento”, afirmó, enfatizando la importancia del respeto mutuo y el valor de la familia en cualquier proceso de éxito.
Asimismo, resaltó que la presencia de una mujer en la vida de un hombre puede ser un pilar fundamental para que, juntos, él alcance grandes logros, como los que ha conseguido.
Frase: “Yo los quiero invitar hoy, a que ustedes piensen en todo lo que va a entrar en su cabeza, es su decisión. Y que ustedes no van a permitir que lo que NO quieran, entre”.
Lucila Esmeralda Córdoba, docente: “Es una charla muy motivante porque nos enseña que como las personas a pesar de las debilidades y problemas, con valores, la fe en Dios podemos superar los obstáculos, y también que debemos tener una mentalidad de adaptarnos y sobre todo la vocación de ayudar desde el amor propio”.
Juan Esteban Herrera: “La charla me pareció muy inspiradora y una forma de superación para nosotros los jóvenes que independientemente de cualquier incapacidad económica o social en cada hogar podemos superar. Que con el esfuerzo y constancia llegamos a donde queremos, siempre con mucha fe”.