El indígena José Rafael Mesa Rivera, fue asesinado por el frente disidente ‘Ismael Ruiz’, en el municipio de Íquira. Los delincuentes lo mataron porque tiene un hermano en el Ejército. “Ya había sido advertido por el grupo Gaor de que se fuera de la región”, dijo una fuente oficial. El Consejo Regional Indígena en el Huila (Crihu), rechazó el crimen.
Rafael Rodríguez C.
Las amenazas de muerte que recibió el joven indígena José Rafael Mesa Rivera por parte de las disidencias de las Farc, porque tenía un hermano en el Ejército, fueron cumplidas: lo mataron a bala en zona rural del municipio de Íquira.
El joven perteneciente al resguardo Nasa Huila Rionegro, en el municipio iquireño, fue acribillado en la vereda Llano Buco, por disidentes del frente ‘Ismael Ruiz’, del bloque occidental ‘Comandante Jacobo Arenas’ del Estado Mayor Central, el pasado sábado.
Allegados a Mesa Rivera indicaron a las autoridades que el joven había salido en compañía de un amigo a bordo de una motocicleta rumbo al centro poblado de Río Negro en Íquira, cuando fueron abordados por los disidentes.
“En el camino fueron interceptados por integrantes del ‘Ismael Ruiz’ y fue atacado con arma de fuego…”, dijo una fuente de la Región Dos de Policía al señalar la versión de los allegados d ela víctima.
Sostuvo que el indígena, al parecer, ya le habían advertido que se fuera de la región. “Que no lo querían ver más por ese sector, ya que era auxiliador de la fuerza pública y porque tenía un hermano que labora en el Ejército Nacional”.
Mesa Rivera, de 21 años de edad, fue impactado tres en el abdomen y una en el codo izquierdo.
“Víctimas sistemáticas”
El asesinato del joven indígena fue condenado por la comunidad y la Consejería de la Asociación de Autoridades Tradicionales del Consejo Regional Indígena del Huila, que a través de un comunicado expresó rechazo.
“Como entidad de representación de las autoridades de gobierno propio de los 33 territorios de los ocho (8) pueblos originarios del departamento del Huila, reiteramos nuestro rotundo rechazo a los hechos de desarmonías en cada uno de nuestros territorios generadas por actores armados en el marco del conflicto armado colombiano que vivimos”.
Indicaron que el crimen de Meza Rivera, que se suma al asesinato del comunero Víctor Baicue Finscue, ocurrido el 4 de octubre de 2023, es la demostración del ataque indiscriminado contra la población indígena. “Se evidencia que los pueblos originarios venimos siendo víctimas sistemáticas de violaciones de derechos Humanos, tales como amenazas, homicidios, desplazamientos y demás”.
Las autoridades indígenas hicieron llamado urgente a las instituciones defensoras de los derechos humanos, Organización de Naciones Unidas, Mapp Oea, Defensoría del Pueblo, Ministerio Público, para que insistan al Gobierno Nacional “a la toma de medidas inmediatas, con el fin de proteger la vida y los derechos humanos de los pueblos originarios del departamento del Huila”.
Reiteraron su rechazo a la presencia de grupos disidentes en la región y la estigmatización de los indígenas. “Reiteramos que la asociación de autoridades tradicionales del Consejo Regional Indígena del Huila (Crihu), rechaza de manera contundente, la presencia de grupos armados en los territorios originarios filiales a la organización, y más aun de la victimización de los comuneros indígenas y de las desarmonias territoriales”.
