El alcalde de Villavicencio, Felipe Harman, se reunirá mañana 11 de agosto con el presidente Gustavo Petro, con el fin de llegar a una solución y arreglar definitivamente el acueducto en la ciudad, y así, no depender de solo una bocatoma principal, por el contrario, que tenga más fuentes alternativas para el abastecimiento de agua.
Pues el mandatario fue relevante al asegurar que las condiciones de la bocatoma cambiaron por los últimos derrumbes que se han presentado en la zona, por lo que la hace más vulnerable.
Es decir que, los constantes deslizamientos hacen que la zona se torne más frágil y expuesta a los cambios climáticos.
“Es una bocatoma que estaba a 15 o 12 metros de altura y hoy está a 2 metros de altura. Entonces, fácilmente se sedimenta porque está ubicada en un cañón y los desprendimientos que genera ese cañón no tienen para dónde agarrar”, dijo el alcalde.
También, aseguró que el servicio pronto estará circulando nuevamente, pero que será una bocatoma más frágil, por lo que esperan que llegue el verano para determinar toda la reorganización del comportamiento de la cuenca.
Estos deslizamientos inhabilitaron la bocatoma, frente a lo cual, se ha implementado un plan de contingencia para mantener el servicio por turnos, en toda la ciudad.
Por esa razón, se puede “depender de bocatomas y no de bocatoma, y de hablar de fuentes alternas y no de fuente alterna, para tener un sistema que no depende únicamente del comportamiento de una quebrada”, puntualizó el alcalde.
