El presidente Gustavo Petro volvió a referirse a la situación económica y fiscal que atraviesa el país debido a sucesos como la caída de la ley de financiamiento, el aplazamiento del gasto que se anunció para el 2025 y el ritmo económico desacelerado que se observó en noviembre y aseguró que todo es culpa del Legislativo, dado que la falta de recursos le obligó a parar muchas de sus apuestas sociales.
Durante la posesión de Laura Sarabia como Canciller, Diego Guevara como Minhacienda y a Jorge Rojas en la dirección del Dapre, el jefe de Estado se fue lanza en ristre otra vez contra el Senado y la Cámara de Representantes, y en particular contra el presidente del Congreso, Efraín Cepeda, a quien acusó de dejar sin plata varias obras estratégicas para el país, como el metro de Bogotá o el Túnel del Toyo en Antioquia.
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“Cuando salió la estadística de la prensa real sobre que cayó el índice de crecimiento del PIB en el mes de noviembre del año pasado, la prensa no lo apuntó, pero hay que decirlo fue porque hubo un recorte presupuestal es decir, porque apagamos el Gobierno y la economía se estancó. Luego, la locomotora éramos nosotros y nos dejamos parar”, arrancó contando el presidente Petro.
Si bien reconoce que al interior de su equipo de trabajo hubo “errores” que permitieron que aquellos que querían parar al país lo consiguieran, Petro Urrego advirtió que los recursos faltantes por culpa del aplazamiento de $12 billones en las cuentas presupuestales nada tiene que ver con su administración, sino con consecuencias de la caída de la ley de financiamiento en diciembre.
Pesos colombianos
iStock
“Ellos (el Congreso) son los culpables, el señor Efraín Cepeda se tiró a Colombia empezando por el Caribe, por su propia ciudad. Sin agüero, como dicen, porque recortó la posibilidad de financiar el presupuesto que iba para eso y lo que iba para el metro”, acotó el mandatario nacional, explicando por qué se redujeron estos rubros.
Cabe recordar que el hecho de que obras como la primera línea del Metro de Bogotá ($770.000 millones), el metro ligero de Medellín ($497.0000 millones) o el Canal del Dique ($710.000 millones); quedaran con sus recursos en el aire; fue uno de los puntos que no gustó para nada en los gremios y mucho menos en las ciudades que contaban con esa plata para el 2025.
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En su discurso, el Presidente de la República también se refirió a la representante Katherine Miranda, de quien dijo que “salió muy contenta y oronda a decir, recorten el gasto, recorten la financiación del gasto y como ella creyó que el gasto es que aquí no la pasamos en fiesta, según dice por ahí un periodista cómico. No he hecho la primera fiesta desde que me posesioné en este gobierno, que ustedes sepan o sí. Ni Vallenato, ni Silvestre Dangond, como la pasaba por aquí, aquí nadie toma trago siquiera”.
Respecto al recorte también hay que decir que más allá de los $3,5 billones para los proyectos de infraestructura como estos y varias obras de cuarta generación y proyectos del Invías, así como los recursos para la atención de emergencias e imprevistos en las carreteras nacionales. Otros frentes como las elecciones del 2026, la seguridad y las pensiones, se verán impactadas por la medida.
Gustavo Petro y Efraín Cepeda
Presidencia / Senado
Llamado a negociar
No obstante, acotó que los $12 billones fueron aplazados y no recortados, a la espera de conseguir la plata que hace falta e instó al Congreso a buscar nuevas fuentes de financiamiento para garantizar la ejecución de proyectos en 2024, dado que reconoce que son obras importantes y requieren un esfuerzo conjunto para sacarlas adelante.
El presidente Petro dejó claro que el aplazamiento del gasto no toca sectores prioritarios como salud, educación y pensiones, sino que se centra en postergar “negocios” de grupos económicos poderosos que, desde su óptica, ahora se quejan porque no hay plata debido a una inestabilidad que ellos mismos propiciaron desde el Legislativo.
“El Congreso de Colombia debe estudiar cómo financiar lo que se ha aplazado para este año. Si decide no hacerlo, no hay problema; pero, en ese caso, habría que aplicar recortes. Si, por el contrario, quiere buscar soluciones, entonces discutamos cómo garantizar la financiación en un contexto más difícil que el del año pasado. Sin embargo, en mi opinión, la decisión de Efraín Cepeda no fue, en absoluto, inteligente”, sentenció.
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Petro enfatizó que el ajuste fiscal no debe recaer sobre la población, sino que deben explorarse mecanismos que aseguren recursos sin comprometer el bienestar social y por eso dijo que está dispuesto a revisar con los congresistas, opciones como reformas tributarias progresivas o mecanismos de financiamiento público-privado. Además, insistió en que el debate debe centrarse en cómo mantener la inversión en infraestructura, educación y salud sin afectar los logros alcanzados en su administración.
En cuanto al sistema pensional, el Presidente negó que su gobierno vaya a reducir las pensiones y afirmó que, si la Corte Constitucional aprueba su reforma, se beneficiará a más adultos mayores con un bono mensual de $226.000, al tiempo que recalcó que su administración busca ampliar la cobertura del sistema pensional y garantizar mayores recursos para los sectores más vulnerables.
Obras del Túnel del Toyo
Jaiver Nieto. EL TIEMPO
“Un periódico de hoy dice que vamos a quitar las pensiones. Nosotros no vamos a quitar ni una pensión, olvídese. El ministro tendrá que explicar, en la rueda de prensa subsiguiente, por qué apareció eso en un decreto que no tiene que ver con las pensiones, sino que fue un error de dos funcionarios. Lo explicará con mucho cuidado para que se entienda que la filosofía detrás de la medida no es para el recorte, sino para el aplazamiento”, indicó.
Finalmente, el mandatario destacó su compromiso con la educación superior, anunciando una partida adicional de $2,1 billones para fortalecer las universidades públicas y subrayó que, en lo que va de su gobierno, se han creado 122.000 nuevos cupos educativos y que la meta es duplicar esa cifra, al tiempo que criticó a ciertos medios de comunicación por generar desinformación y atribuyó errores en la comunicación oficial a fallas dentro de la administración pública.
