Bogotá está localizada en una zona de amenaza sísmica intermedia, generada por los diversos sistemas de fallas geológicas activas existentes en el país, en mayor o menor grado en función de la distancia de la capital a estos sistemas.
En la actualidad, no hay un estudio que le indique a los ciudadanos cuáles son las zonas de la ciudad más proclives a presentar daños en infraestructura por un movimiento telúrico.
Daniel Ruiz, profesor asociado de la facultad de ingeniería de…