Un reguero de arena esparcido sobre la sangre del señor que asesinaron la noche de este domingo frente a una droguería del barrio La Fragua, en la Comuna II de Soacha, con el fin de borrar los rastros del asesinato que sembró el temor en la concurrida cuadra comercial, fue lo que observaron los moradores en la mañana de ayer.
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Sin ninguna contemplación, un pistolero se acercó al tumulto de gente que había frente a una droguería y le quitó la vida a Julián Mauricio Robledo Bermúdez (47 años), como fue identificado el hombre que quedó tendido en el suelo y con un disparo al costado izquierdo de la sien.
Después del escenario de horror y miedo, las dudas empezaron a surgir entre los testigos del macabro asesinato. Según las autoridades, el hombre estaba envuelto en el cobro de un dinero como parte de sus negocios, los cuales siguen siendo rastreados para dar con los culpables de este despiadado asesinato.
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Un tiro frente a la droguería
Transcurrían las 8 de la noche en la calle 4 B con transversal 7 y aún una variedad de negocios permanecían abiertos. Era el caso de una droguería esquinera, en la cual se formó una hilera de personas, entre ellas se encontraba Robledo.
El señor estaba esperando para entrar a la droguería, se encontraba sobre el andén, ya que había varias personas adentro. Nosotros estábamos ocupados atendiéndolos, cuando escuchamos un solo disparo. Mi compañera empezó a gritar, todo el mundo gritó y nos agachamos detrás del escaparate durante varios minutos, pensando que se iba a armar una balacera. Cuando ya retomó la calma, me asomé y el cuerpo del señor estaba la mitad dentro de la droguería y la otra mitad en la acera. ¡Ya estaba muerto! Nosotros cerramos como pudimos y nos fuimos. Toda la cuadra cerró”, contó a Q’HUBO el tendero del local.
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Inmediatamente, las autoridades de la estación Centro hicieron presencia en la escena del homicidio. Al sicario solo le bastó un tiro para segar la vida de aquel hombre. El asesino escapó aprovechando la multitud aterrorizada y, hasta el momento, su rastro no ha sido encontrado por las autoridades.
Sobre los móviles del sicariato, las autoridades han podido recopilar pruebas de que el ahora occiso, presuntamente, era cobrador de deudas.
Lo que se sabe es que sin mediar palabra lo impactan. Al indagar con sus familiares, manifestaron que al parecer se dedicaba al cobro de préstamos por ‘gota gota’, o al menos eso es lo que arrojaron las primeras indagaciones”, contó de manera extraoficial una autoridad del caso.
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Las autoridades ya se encuentran en la verificación de las cámaras de seguridad y recopilación de testimonios para dar con las personas involucradas en este crimen. Por el momento, solo queda la arena sobre el andén y un recuerdo de la dantesca escena.
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