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Una red de insumos para el narcotráfico estaría operando desde Mosquera y Bogotá, Cundinamarca. Varias personas, aparentemente comprometidas en el ilícito fueron, detenidas en esas ciudades, al igual que en Cúcuta y Ocaña, Norte de Santander.
Los resultados de las acciones contra las bandas dedicadas a la producción y comercialización de drogas ilícitas fueron entregados por la Fiscalía, una vez completó procedimientos investigativos.
Según el informe, en total fueron capturados cinco personas quienes, en principio y conforme a las pruebas, estarían involucradas en esas actividades al margen de la ley.
Todos ellos, de acuerdo a los señalamientos, serían los encargados de proveer los insumos químicos requeridos en la producción de estupefacientes
Red de insumos del narcotráfico
Los procedimientos de las autoridades permitieron la incautación de “48 toneladas de sustancias sólidas, 5.200 galones de precursores líquidos y cinco vehículos”. Estos elementos fueron ubicados dentro de establecimientos comerciales que operaban en Mosquera y Bogotá. Deducen los investigadores que, aparentemente, servían de fachada para ocultar el propósito de fondo: surtir insumos para la producción de narcóticos.
Dentro de los expedientes y como argumento de las acusaciones se encuentran elementos con los cuales la Fiscalía argumenta las acusaciones contra los detenidos.
Para las autoridades, estas personas, aparentemente, desviaban insumos químicos necesarios en la producción de cocaína; usaban como fachada una empresa de pinturas. En razón a ello les atribuyen los delitos relacionados con “tráfico de sustancias para el procesamiento de narcóticos y concierto para delinquir con fines de tráfico de estupefacientes”.
Manejo investigativo
Los procedimientos de inteligencia y acopio de pruebas fueron coordinados por calificadas unidades de la Dirección Especializada contra el Narcotráfico, una de las secciones de la Fiscalía General. Según ellos, los acusados “estarían vinculados a la adquisición y desvío de sustancias químicas controladas, usadas para la producción de clorhidrato de cocaína”.
También revelaron que la organización delictiva habría utilizado la fachada de una empresa de pinturas para adquirir insumos cuya venta está estrictamente controlada. Posteriormente, los almacenaban y coordinaban su transporte en vehículos de carga hacia Norte de Santander, donde serían utilizados en la producción de drogas ilícitas.
Los capturados, identificados como Liz Viviana R. P., Rubén O. A., John S. R., Nubia V. M. y Melquisedec G. R., fueron privados de su libertad por orden judicial. La primera de ellas (Liz Viviana) es señalada como posible cabecilla de la organización.
Rubén O.A. sería el encargado de la adquisición de los precursores químicos, mientras John S. R. habría gestionado los vehículos para el transporte de los insumos. A su vez, Nubia V. M. era responsable de los aspectos administrativos de la empresa de pinturas, y Melquisedec G. R. se desempeñaba como conductor de los vehículos involucrados.
Las capturas se llevaron a cabo en operativos conjuntos con la Policía Nacional en Bogotá, Mosquera (Cundinamarca), Cúcuta y Ocaña (Norte de Santander). Durante el proceso investigativo, se incautaron 48 toneladas de sustancias sólidas, 5.200 galones de precursores líquidos y cinco vehículos.
De momento, todos ellos permanecerán con medida de aseguramiento mientras la justicia se encarga de definir su compromiso frente a las leyes colombianas.
