Tomado de infobae.com
El 9 de enero de 2023, en el departamento del Cauca, se vio sacudido por un derrumbe en la localidad de Rosas, que dejó unos 700 damnificados y unos cinco caseríos destruidos junto con un tramo de la vía Panamericana que conecta la región con el resto del país.
Esta situación mantiene prácticamente incomunicado a todo el suroccidente de Colombia y hay parálisis en el transporte de gas, medicamentos, combustible, alimentos y todo tipo de elementos que ya deja pérdidas económicas superiores a 1,6 billones de pesos entre los departamentos de Cauca y Nariño.
Según Noticias Caracol, en la ciudad de Pasto varios comerciantes han decidido no abrir más los negocios debido a la falta de ventas y de insumos para surtir los locales, pues quieren evitar más pérdidas. Incluso, algunos han enviado a sus trabajadores a un descanso temporal, mientras que otros simplemente los han despedido. En total, unos 10 mil empleos estarían en riesgo.
Asimismo, de acuerdo con la Cámara de Comercio de Pasto, ha habido un incremento en la cancelación de matrículas, una pérdida de unos 250.000 litros de leche que son llevados desde este departamento a plantas de procesamiento en el Valle del Cauca y los viajeros que se encontraban vacacionando en las fiestas de fin de año quedaron atrapados en ciudades como Cali y no han podido volver a sus sitios de origen. Además, los sectores de turismo, construcción, transporte y agricultura han reportado pérdidas diarias por 250 millones de pesos.
También se ha visto fuertemente golpeado el sector avicultor por la escasez de insumos para la crianza de aves. En Nariño hay 140 granjas para la cría de pollos y huevos que necesitan entre 340 y 350 toneladas diarias de alimento que no han podido llegar al departamento; así, 2,5 millones de aves se han visto afectadas.
Por su parte, el Gobierno Nacional dio a conocer las medidas que buscarán atender la emergencia y la crítica situación de desabastecimiento que ha venido padeciendo esa zona del país.
Entre las medidas tomadas a corto plazo, el presidente manifestó que se abrirán unas vías alternativas que en este momento se están construyendo y que serían entregadas el próximo 20 de febrero, para que nuevamente haya paso de transporte de carga y el vehicular habitual.
Mientras pasan los días hasta la apertura de estas vías, el Gobierno efectuará otro tipo de medidas para que comience a entrar y salir mercancía del departamento de Nariño.
Así pues, se han establecido varias rutas que ya están en uso de abastecimiento de gasolina en el departamento, una de ellas tiene que ver con el cruce por el territorio con Ecuador. Otra es marítima, de hecho hace unos días llegó a Tumaco el primer buque con 1.260.000 galones de combustibles líquidos para Nariño, que rápidamente se empezó el proceso de entrega a los municipios
Según el presidente de la República, la dificultad para traer gasolina a la región determinó, en su momento, un crecimiento especulativo de precios, sin embargo, ante esto el Gobierno decidió ponerle fin a esa especulación ordenando un límite en los precios de la gasolina y el Diesel. Además, el ejecutivo adquirirá las cosechas que produzca ese departamento.
“Esos precios tendrán como límite $8.916 galón gasolina y $8.396 galón Diesel. Compraremos como Estado, como Gobierno, cosechas del departamento de Nariño que serán algunas repartidas en zonas de empobrecimiento del departamento, la mayor parte de lo que exporta Nariño hacia el resto del país, se llevarán a los territorios con mayores índices de hambre en toda Colombia”, informó Petro.
El presidente también dio a conocer que el Gobierno comprará una porción adicional de terrenos cercanos a donde ocurrió el derrumbe para reubicar a las familias que se vieron afectadas y perdieron su terreno, según el mandatario, pasarán de tener media hectárea, a cinco hectáreas de tierra fértil.
Foto: Invias
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