Las familias de Yotojorotshi, ya no recorrerán largas distancias para buscar agua, tienen a escasos metros los 20 litros diarios del vital líquido que garantizarán su supervivencia; y así como ellos otras tres comunidades se beneficiarán.
“El agua siempre ha sido una de las necesidades más apremiantes de La Guajira, por primera vez vamos a tomar agua potable en la ranchería Yotojorotshi lo que se resuelve con una planta de tratamiento de agua, diariamente estará produciendo 20 mil litros del preciado líquido”, expresó la autoridad tradicional Laureano González, quien feliz celebra estos avances importantes que los beneficia.
Este 7 de diciembre fue inaugurado este microacueducto, desde hace tres años esta comunidad wayuu buscaba hacer realidad este sueño, que se logró gracias a que son territorio de Equidad de Air-e, y en alianza con tienda de La Empatía, ministerio de Vivienda, Departamento de Prosperidad Social –DPS-, entidades públicas y privadas y los 1.500 colombianos que hicieron su aporte, se estructuró un sistema de microacueducto que les permitirá tener agua las 24 horas. Fue un trabajo articulado que brinda bienestar y calidad de vida a los indígenas wayuu.
Los antecedentes para un territorio de Equidad se remontan con el caso de muerte por desnutrición del niño Wayuu, de un año de edad, Gabriel José González, según señaló la autoridad tradicional, por haber consumido agua de jagüey; por eso Air-e convirtió a Yotojorotshi en territorio de equidad buscando mejorar la calidad de vida de niños, niñas, adolescentes, jóvenes, adultos mayores y todas las familias wayuu brindando acceso al agua potable de manera segura.
“Es inevitable rememorar aquellos días en los que el agua parecía un sueño lejano, una quimera inalcanzable; la sequedad se respiraba en el aire y nuestros corazones se resquebrajaban con cada gota que veíamos negada a esta comunidad”, señaló Víctor De Luque, Gerente de Valor Social de Air-e.
Con el agua potable que brota de una pluma y va a una casa de Yotojorotshi, están cambiando la historia de las comunidades wayuu en este sector rural de Maicao, a 15 kilómetros del casco urbano en un lugar inaccesible, por la antigua vía que conduce a Uribia, el agua sale de lo más profundo de la tierra y se queda para siempre en Yotojorotshi, alegrando la vida de sus habitantes.
