La emoción de María Elvira Romero es la misma que experimentan más de 1.800 habitantes del corregimiento Montañitas en La Cumbre, donde se hizo realidad el sueño de contar por primera vez con un acueducto que reemplazará la costumbre de recoger agua lluvia en baldes.
La habitante de esa zona rural dijo: Gracias a Dios, a la Gobernación y a nosotros también como comunidad, porque aportamos nuestro granito de arena, a mis 62 años vengo a tomar agua potable. Antes nos tocaba buscar…