Lisboa, 16 nov (EFE).- Los errores en las escuchas y la decisión del juez de dejar fuera los delitos de corrupción y prevaricación han sembrado la duda sobre si la Fiscalía portuguesa se precipitó con el caso que hizo dimitir a António Costa, pero la investigación sigue abierta y todavía no se puede descartar una acusación.
Los portugueses se vieron sorprendidos el pasado 7 de noviembre, cuando el primer ministro anunció su dimisión tras saberse investigado en un caso de…