Producto del impacto de la fuerte guerra de tarifas, visible en una sobreoferta que en el mercado local está en el 30 por ciento, y del duro impacto de la disparada de los costos de los combustibles —así como por la devaluación del peso— , los balances de las aerolíneas comerciales de pasajeros que operan en el país, en lugar de despegar, siguen con un gran saldo en rojo.
Aunque podría pensarse que tras la reactivación de la industria, que hace varios meses superó los niveles…