Un nuevo golpe a la minería ilegal dieron el Ejército y la Policía en la costa Pacífica caucana.
El operativo contra explotación ilícita de yacimientos mineros se llevó a cabo en la vereda San Antonio de Gurumendi, del municipio de López de Micay.
Hasta esa zona, llegaron tropas del Batallón de Infantería No.56 ‘Coronel Francisco Javier González’ del Ejército Nacional, quienes con apoyo de la Fuerza Aeroespacial y la Policía, ubicaron la zona en donde se venía presentando un grave daño en contra del ecosistema.
Las autoridades allí hallaron ocho retroexcavadoras, un dragón, cinco motores industriales y dos motobombas, cuyo avalúo es superior a los cinco mil millones de pesos, y que eran empleados para remover la tierra y con el uso indiscriminado de químicos obtener minerales como el oro.
Las Fuerzas Militares, coordinación con la Policía Nacional, ubicaron la maquinaria utilizada para la explotación ilegal de yacimientos mineros en esta zona y procedieron a destruirla.
Extracción
Según informaron las autoridades, en la zona se realizaba la extracción de productos que serían comercializados para el financiamiento de estructuras y grupos armados organizados.
Así mismo, informaron que con este resultado se logra una afectación económica de la disidencias Jaime Martínez de las Farc, producto de la inutilización de la maquinaria valorada en más de cinco mil millones de pesos, con la cual se generaba una extracción estimada de 36.8 kilogramos de oro al mes por un valor de ocho mil millones de pesos en el comercio.
Deforestación
Además, con el fin proteger el medio ambiente, los uniformados intervinieron un área estimada de quince hectáreas, correspondiente a 132 mil metros cúbicos, y detener la desforestación de nueve mil árboles, lo cual tiene un valor estimado para la recuperación ambiental de dos mil millones de pesos, así mismo, un tiempo en recuperación vegetal de más de 30 años.
El Ejército informó que la operación se adelantó en el marco de la Ley sobre “actividades que son objeto de control en el desarrollo de la minería” y agregó en un comunicado que “se continúa la afectación a las economías ilícitas de las estructuras armadas que delinquen en la región, impactando principalmente un eslabón de la cadena criminal de la cual obtienen recursos para su financiamiento”.
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