Durante una prospección arqueológica realizada en el proyecto petrolero Caño Caranal, en los límites de las veredas Santa Isabel y Mata de Coco, del municipio de Arauquita, un equipo de expertos halló algunos fragmentos de cerámica y elementos líticos.
Los descubrimientos se originaron a partir de la actividad que realiza SierraCol Energy Arauca, LLC (“SierraCol Energy” o la “Compañía”) en el área, en cumplimiento de la Autorización de Intervención Arqueológica No.7976, otorgada por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH) al Doctor Alejandro Bernal Vélez, Coordinador del Equipo de Arqueología a cargo de la actividad. En los próximos días, y como parte del Plan de Manejo Arqueológico para el sitio.
La compañía que desarrolla el proyecto, SierraCol Energy, anunció que iniciará el rescate arqueológico, consistente en excavaciones controladas y sistemáticas. De esta manera, se conservarán adecuadamente los elementos hallados para su análisis en el laboratorio que se tiene dispuesto en el complejo petrolero Caño Limón, y así mismo continuar con las actividades operativas previstas por la Compañía.
Posteriormente, el ICANH definirá la custodia y el destino final del material encontrado. El Doctor en Arqueología, Bernal Vélez, aseguró: 
“Aunque es necesario un análisis detallado, por ahora podríamos intuir que este hallazgo se trata de restos domésticos relacionados con los grupos humanos que poblaron la región de Arauca con posterioridad al siglo X d.C., y por supuesto son evidencias que serán aprovechadas para contribuir en la documentación material y el conocimiento de la historia del departamento de Arauca. Es importante recalcar que estos trabajos se realizan en el marco de las Medidas de Manejo Arqueológico, supervisadas por el ICANH”.
Para estas actividades de prospección arqueológica, se cuenta con un equipo de Arqueología con alta preparación académica, técnica y científica, tanto en el campo de la antropología como la arqueología, garantizando una rigurosa gestión del patrimonio arqueológico bajo los más altos estándares y protocolos en esta materia.
En este hallazgo en particular, dos arqueólogos y seis miembros de la comunidad contratados para acompañar estos trabajos, vienen trabajando desde hace cuatro semanas.
