Durante una jornada de limpieza en el barrio Bonanza, en el oriente de Montería, residentes encontraron una cueva con más de 500 huevos de iguana en proceso de eclosión. El hallazgo generó asombro en la comunidad y llevó a la intervención inmediata de la Corporación Autónoma de los Valles del Sinú y el San Jorge (CVS), cuyos biólogos recomendaron no manipular los huevos hasta completar los estudios ambientales.
Las iguanas, que se reproducen una vez al año, depositan sus huevos en túneles de hasta 50 cm de profundidad y varios metros de largo, donde la arena húmeda y el calor natural del sol permiten la incubación. Según expertos, a una temperatura de 30,6°C, los huevos eclosionan en un período de 75 días, como ocurre en Montería. Una vez la iguana pone sus huevos, se aleja del nido para evitar la competencia por alimento con sus crías.
El subdirector de Gestión Ambiental de la CVS, Albeiro Arrieta, instó a los habitantes de Bonanza a evitar el contacto con los huevos y aseguró que la zona será protegida mientras se realizan los análisis necesarios. La intervención busca garantizar el proceso de nacimiento de las iguanas y conservar su hábitat natural en la región.
Este hallazgo resalta la importancia de la conservación de la fauna silvestre y la necesidad de sensibilizar a la comunidad sobre el respeto a los ecosistemas urbanos. Las autoridades ambientales continuarán monitoreando la zona para asegurar el bienestar de las especies y evitar alteraciones en su ciclo de vida.
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