Con profundo pesar y tristeza quiero compartir la triste noticia del fallecimiento de nuestro gran amigo y colega Vladimir Lugo, Asesor Técnico del Programa Mojana, Clima y Vida. Vladimir ha trabajado con el PNUD en varias funciones a nivel comunitario por más de siete años. Vlacho, como lo conocen en su equipo y las comunidades con las que trabajó, fue infectado por covid-19 y sufrió complicaciones después de pasar un poco mas de una semana en una UCI en Montería, peleando por su vida.
Vladimir era mojanero de corazón, aunque había nacido en Montería. Su responsabilidad, compromiso y entrega por mejorar las condiciones de vida de la población más necesitada y vulnerable a los efectos del cambio climático de La Mojana hizo que Vladimir recorriera las ciénagas y bosques que tanto disfrutaba, y que apoyara a miles de personas a convertir sus sueños en realidad. Ha sido uno de los expertos del PNUD que sabia lo que significa la adaptación al cambio climático para las comunidades mas expuestas y su legado será haber ayudado a crear resiliencia en las comunidades a las que dedicó tanto de su vida.
Sus compañeros del Programa Mojana Clima y Vida lo recuerdan como una persona cálida, amistosa y analítica. “Antes de decir algo siempre se quedaba pensando, y luego con gran calma, exponía los análisis más precisos y detallados sobre cualquier tema, desde los sistemas productivos de La Mojana hasta los grandes cantantes vallenatos y su influencia en la cultura sabanera.”
Este gran conversador, de sonrisa amplía, y alegría contagiosa vivía la vida con pasión, pero siempre pensando en el futuro, le gustaba estudiar, hizo su especialización pensando en cómo mejorar la vida de las comunidades con las que trabajaba y, con gran dedicación estaba haciendo su maestría; más conocimientos para dar respuesta a las difíciles situaciones de las mujeres y hombres con los que trabajaba cada día y llevaba en su corazón.
Su Madre, la señora Sally, su hermana, su esposa Sayli, y sus hijos Julián y Zoe, eran el pilar y motor de su vida. Sus ojos brillaban al hablar de ellos, y su trabajo, sus ganas de vivir y toda su energía era para su familia. Hay muchas anécdotas después de tantos años de trabajo juntos, muchas que hasta ahora nos sacan una sonrisa y nos hacen pensar en el profundo vacío que deja su partida.
En nombre del PNUD, a su familia y amigos más cercanos, a sus compañeros de trabajo del Programa Mojana Clima y Vida y del Área de Desarrollo Sostenible, les expresamos nuestras más sentidas condolencias por la pérdida de un valioso ser humano, padre, esposo, colega, pero sobre todo un gran amigo, ejemplo del compromiso con el desarrollo sostenible y los que más dejados atrás, la pasión por su trabajo y el amor por su familia.
Querido Vlacho, ten la seguridad que tu legado y tus acciones jamás serán olvidadas. Te recordaremos con gran cariño y admiración. Descansa en paz. Un abrazo fuerte, lleno de solidaridad y afecto.
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