En la calle de la Alhambra, pleno corazón del centro de Medellín, labora Giovanni Hoyos, un comerciante y emprendedor que se mueve entre las obligaciones de su tienda y las ganas de impulsar a Orangután, la marca que creó hace ocho años y que le apostó al talento de la población privada de la libertad.
Los morrales que exhibe en las estanterías de su negocio invitan a entrar para curiosearlos de cerca, evocan todo ese arte callejero que le ha dado a la capital antioqueña una…