Hace aproximadamente un mes, el Hospital Departamental Universitario San Juan de Dios de Armenia -de Puertas Abiertas- implementó una política innovadora que permite a los familiares acompañar a sus pacientes para mejorar su salud física a través del apoyo emocional y mental. Este enfoque ha sido bien recibido, y ahora el hospital está planeando dar un paso más al permitir la entrada de mascotas, específicamente perros y gatos, a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) a partir del próximo año.
Siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se establecerán protocolos estrictos para garantizar la seguridad de los pacientes, el personal y las propias mascotas. Estos protocolos incluyen la desinfección de las patas y el pelaje de los animales, la verificación de su esquema de vacunación completo y la limitación del tiempo de visita al cubículo de la UCI.
La gerente del hospital, Diana Carolina Castaño, destacó la importancia de esta iniciativa: “El DANE nos notificó hace aproximadamente 15 días sobre el decrecimiento en la natalidad a nivel nacional. Esto significa que cada vez más familias deciden tener menos hijos, y los hijos se están convirtiendo en los hijos perrunos o gatunos. De esta manera, tenemos que cambiar nuestro chip y permitir que las mascotas puedan entrar en la recuperación de los pacientes más críticos que tenemos en las instituciones”.
El hospital ya está estructurando un cronograma detallado que incluirá varias etapas y protocolos específicos para el ingreso de las mascotas. Estos protocolos abarcarán desde la llegada al estacionamiento, el ingreso a la institución de salud y las condiciones que deben cumplir las mascotas, como su peso y estado de salud. Este enfoque sigue las prácticas ya establecidas en instituciones de salud en Estados Unidos.
Además, los perros de servicio también tendrán acceso bajo un protocolo específico. A la salida, las mascotas serán sometidas a un proceso de desinfección para garantizar que no se ponga en riesgo a los usuarios, personal ni pacientes.
La implementación de esta política subraya el compromiso del hospital con la innovación y la mejora continua de la atención al paciente, adaptándose a las tendencias sociales y a las necesidades emocionales de sus pacientes.
