La Fiscalía imputó a dos miembros de la Policía colombiana por su presunta participación en un su suceso ocurrido el 27 de febrero en Puerto Leguízamo, en el departamento del Putumayo (sur) en el que murió un soldado y fue detenido de manera ilegal el líder indígena Luis Evelio Rodríguez.
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Según la investigación de la Fiscalía, el 26 de febrero el soldado Alexander Orozco accionó su fusil de dotación, acabando con la vida de tres de sus compañeros en el Batallón de Selva 49 y después huyó.
Al día siguiente, unidades policiales lo vieron remando en una canoa por el río Caquetá y uno de los patrulleros, Darwin Emilio Arcos, le disparó dejándolo herido. El militar murió unos días después en un centro asistencial en Florencia (capital departamental de Caquetá).
La Fiscalía lo acusa por un posible uso desproporcionado de la fuerza, ya que el soldado se encontraba en la canoa en estado de indefensión y no representaba peligro.
Tras estos hechos, el subintendente Mendoza Chilama dispuso la captura del líder indígena Rodríguez Arigatoque, que observaba el traslado del soldado lesionado por el río. Durante la detención, le fueron incautados 27 millones de (6.100 dólares o 5.800 euros) que llevaba en un maletín para pagarles a los trabajadores de un proyecto social.
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Según lo que dijo entonces la Policía, detuvieron al líder indígena porque supuestamente estaba ayudando al soldado a huir, pero según la Fiscalía no había fundamento ni sustento para tal afirmación, por lo que fue dejado en libertad.
Ambos detenidos han sido imputados por los delitos de homicidio agravado, privación ilegal de la libertad, fraude procesal, y hurto calificado y agravado, cargos que los acusados no han aceptado.
EFE