Tras las repetidas quejas de la comunidad de los barrios La Feria, Girardot y Santander, por los contantes olores putrefactos, la Alcaldía de Bucaramanga, Policía Ambiental y la Cdmb realizaron un operativo que terminó con la identificación de un matadero clandestino.
En el lugar se logró la incautación de 627 kilos de carne de caballo y burro, listas para comercializar. La venta del producto equivalía a más de $7 millones.
Los malos olores eran producidos por las vísceras y esqueletos de los equinos que no tenían un adecuado manejo.
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Las autoridades procedieron al traslado de 12 asnos más que permanecían en pie, en los corrales improvisados, al centro de protección animal de la Alcaldía de Bucaramanga.
El operativo dejó un sancionado, el hombre responsable del lugar.
